Esta semana ya avisé que nos tocaba irnos al otro extremo de la saga después de Mania. Classic es colorido, desenfadado (normalmente)… ahora nos vamos a la parte popularmente conocida como “edgy” de la saga, con Shadow The Hedgehog.

El juego de Shadow es bastante conocido entre los fans para bien o para mal como un juego clave en la historia de Sonic, siendo el primero en 10 años en dar protagonismo a otro personaje (y el único hasta 7 años más tarde que saldría Sonic 4 Episode Metal, aunque eso realmente no llega a juego completo así que…) y continuaba la historia de Sonic Adventure 2 hasta el punto de ser considerado por muchos, entre los que me incluyo, parte de la saga principal. Personalmente, a mi el juego me encanta, pero no estamos en esta sección para hablar de juegos, si no de merchandising.

Guste o no este juego, una cosa que todos tenemos en común es que sabemos que prácticamente no hay merchandising basado en él. Una pena, porque el diseño de los enemigos por ejemplo da lugar a que se pudieran hacer figuras bastante chulas si se les pone empeño, pero nunca llegó a pasar. Las dos únicas piezas de merchandising que al menos puedo recordar ahora mismo son una pequeña figura de Black Eye hecha por Jazwares (¿futuro Museo?) y un mando de PS2. Si, el protagonista de hoy.

El mando salió a la venta en 2005 como parte de la promoción del juego. Está hecho por Nubytech, una empresa que hacía mandos sobre licencias para PS2, igual os suenen por los sticks arcade de Street Fighter o el mando motosierra de Resident Evil 4. Por desgracia eso es todo lo que hicieron, mandos para PS2, no se ha vuelto a saber de ellos desde entonces.

Pasando a hablar del objeto en sí por fin, lo primero que hay que decir es que la presentación es maravillosa. Viene encerrado en una especie de capsula roja transparente, perfecto para guardarlo entre usos y que no coja nada de polvo.
Dentro de la bola, aparte del mando con una especie de estante de plástico para “posarlo”, lo único que viene es un librito de instrucciones que además incluye artworks decorativos. Como digo, la presentación está muy lograda y los artworks tanto de debajo de la cápsula como en el libro de instrucciones ayudan mucho a conseguir eso.
El mando también tiene un diseño bastante bonito, con un color negro y partes rojas, además del careto de nuestro erizo enfadado favorito.
En lo que viene siendo comodidad y uso, para aquellos que lo vayan a usar para jugar, decir que el mando es algo más pequeño que el Dualshock 2 (foto cogida del análisis que hizo IGN en 2005 porque no tenía mandos para compararlo yo en el momento mire usted). He visto gente decir que si tienes manos grandes pueden dolerte si juegas con él mucho rato, pero yo lo usé durante horas para escribir esto y las sigo teniendo enteras. Y no son pequeñas. Supongo que eso será como todo, dependerá de cada uno, pero no puedo decir que me haya pasado.
Por otro lado tenemos los botones. Tenía una foto hecha por detrás pero por algún motivo el vacío espacio temporal que hay entre la cámara y el PC ha decidido quedársela y no me la quiere devolver. En su defecto, me conformaré con deciros que los botones L2 y R2 al principio se hacen un poco raros, porque se hunden más de la cuenta, pero funcionan bien y es cuestión de acostumbrase, sobretodo viniendo de los del Dualshock 2 que son muy poco profundos. La cruceta es de un solo botón en lugar de cuatro como en el Dualshock 2, permitiendo ocho direcciones.

Aquí es donde viene lo raro. Al ser más pequeño se ha tenido que cambiar la configuración de dos botones, el Start y el Select. Ahora están en los extremos del mando, Start debajo de los botones principales a la derecha y Select debajo de la cruceta a la izquierda. De nuevo, es cuestión de acostumbrarse, pero no es nada intuitivo, y menos cuando el botón de Mode ocupa todo el centro con su enorme tamaño.

Por lo demás, los botones responden bien, es cómodo, es bonito… Un buen mando en general. La cuestión ahora es, ¿merece la pena usarlo para jugar? Personalmente, si no tuviera este mando y pudiera conseguir uno, rara vez lo sacaría de su cápsula… Y no me malentendáis, no es porque lo quiera para no usarlo nunca, es simplemente que por lo que os puede costar tanto moralmente como económicamente conseguir uno, no merece la pena exponerlo a que se caiga, a comerse una rabieta porque las emeralds de Sonic Heroes son horribles, etc. Un Dualshock 2 es más cómodo simplemente por la costumbre que tenemos al mando y cuesta menos de lo que gastaríamos en patatas fritas de bolsa para una semana. Este mando es raro, raro de narices, y si consigues encontrar uno aún te queda que el que te lo venda lo haga a precio razonable y no a ~100€ o algo así. Así que si compráis uno, personalmente os diría que sea para añadirlo a vuestra colección porque verdaderamente os guste Shadow o el diseño, pero no porque necesitéis un segundo mando para vuestro hermano pequeño.

Por favor no se lo dejéis a vuestros hermanos pequeños.

Y con esto llegamos al final de esta entrega. En un par de semanas seguiremos viendo cositas rarunas que coleccionar, ¡nos vemos entonces!

PD: Toda mención a Shadow The Hedgehog es buena excusa para recordar este vídeo. Para los que no lo conozcan, si, es oficial. Para los que ya lo conozcan, os quiero.