Opinión: El regreso de Shenmue


Shenmue 1 y 2 acaban de llegar y el 3 ya tiene fecha.

La espera ha sido larga y por momentos parecía que lo iba a ser aún más, pero por fin tenemos ya de vuelta a Shenmue entre nosotros con la reedición de sus dos primeras entregas, mientras que también se ha confirmado que dentro de un año tendremos la tercera parte disponible.

Cabría esperar que todo fuesen alegrías y celebraciones, pero como los fans de Sonic bien sabemos, en los últimos tiempos todo (o casi todo) cuanto hace Sega es vapuleado en las redes sin compasión. Solemos creer que es algo que solo afecta al erizo, pero Shenmue ha venido a sacarnos de nuestro error.

El juego probablemente más solicitado de todos los tiempos (de hecho lo pone en la propia caja del mismo) está siendo recibido con palos y piedras por parte de los usuarios. Hay que recalcar esto, que es solo una parte, pero como es costumbre acaban haciendo más ruido que los que están en su casa disfrutando alegremente del juego.

¿Quién podría imaginarse algo así? Pues no éramos pocos los que advertíamos de la posible mala recepción del juego, de hecho aquí mismo tenéis un artículo mío de hace 4 años donde ya advertía de todo esto. Shenmue no es un juego fácilmente digerible por todo tipo de usuario, no lo era en su día y ahora menos todavía. De modo que la reacción de ciertas personas era bastante predecible.

Que si el control es ortopédico, que si ha envejecido mal, que si es un simulador de paseos, que si Yu Suzuki estaba mejor haciendo arcades… La retahíla de quejas es tan larga como la lista de personas que parecen haber estado demasiado ocupadas durante las últimas dos décadas como para molestarse en probar el juego original antes de comprar esta reedición. Y luego por supuesto es culpa del juego, jamás de ellos por no informarse antes…

El viaje de Ryo vuelve a comenzar.

Pero si bien este tipo de lloros era bastante previsible para cualquiera que nos tomásemos la molestia de jugarlos, no ha sido esta la única fuente de quejas. La otra ha sido una que a los fans de Sonic nos es terriblemente familiar, los “bugs fantasma”. Nosotros ya sabemos de sobra cómo funciona esto, pero para quién no lo sepa, los “bugs fantasma” son básicamente coger un juego que tenga algunos bugs, y exagerarlo hasta el punto de decir que es completamente injugable y está roto.

El procedimiento es el mismo que ya hemos visto más de una vez con el erizo: Sale el juego, se reportan algunos bugs, a quién le interesa vomitarle bilis al juego se pone a exagerarlos, y montones de personas que ni se han molestado en comprobar si es cierto corren a las redes a dejar clara su indignación.

Y entre todo este barullo están los que realmente tienen interés en el producto y no únicamente en desahogar sus miserias personales en Internet, viéndose atrapados en una espiral de cuñadeces y bilis en la que uno no sabe realmente qué creer. Mientras tanto los que están jugando al juego y diciendo que no es para tanto, son asaltados en redes y foros por individuos que no tienen el menor reparo en pasar al insulto en cuanto se les acaban sus escasos y patéticos argumentos basados en nada, porque ni se han molestado en probar el juego.

¿Entonces cuál es la situación real? Pues más o menos la previsible, e incluso mejor me atrevería a decir. Y es que era de esperar que unos ports de bajo presupuesto (no se puede culpar a Sega de falta de confianza en el producto precisamente…) de dos juegos tan sumamente complejos, acabásemos teniendo que comernos algunos bugarros tal y como ocurre con prácticamente todo juego que sale hoy en día.

Por experiencia personal, y la que me han transmitido otras personas que lo están jugando, la frecuencia de los bugs varia bastante dependiendo de en qué versión juguemos, y rara vez afectan realmente a la jugabilidad. La mayoría son pequeños fallos de sonido, secuencias que no se generan adecuadamente, o cosas incluso simpáticas como que sin razón aparente pasemos a jugar un rato en primera persona. Nada que haga el juego ni mucho menos injugable como dicen algunos.

Recordad que podéis desbloquear los arcades originales de Hang On, Space Harrier, Out Run, y After Burner 2.

Evidentemente todo habría sido mucho mejor sin estos bugs, que por cierto parecen hacer más mella en la primera que en la segunda entrega. Pero al menos desde el primer día tanto Sega Europa (la responsable de este port), como d3t (desarrolladora del mismo) han puesto a disposición de los usuarios todo lo necesario para que reporten los bugs que se encuentren, a fin de ir arreglándolos mediante parches.

Teniendo en cuenta que estos fallos no parecen ser cosa grave, y la animada disposición de los responsables por corregirlos, es bastante probable que en apenas unas semanas ya tengamos el juego a pleno rendimiento. Pero claro, para entonces el daño ya estará hecho. Todos recordamos perfectamente lo sucedido con juegos como Sonic Boom Rise of Lyric, al cual aún se le sigue acusando de estar plagado de bugs a pesar de que los principales que tenía ya fueron corregidos hace tiempo.

Dentro de un año cuando salga Shenmue 3 no faltarán voces acusando a estos ports de ahora de haber “matado” la franquicia por estar plagados de bugs, por mucho que para entonces funcionen más que de sobra como es debido. Y será por ahí por donde los de siempre encontrarán la forma de culpar a Sega de los problemas de un juego en el que ni siquiera tienen nada que ver (hablo de Shenmue 3). Ya hemos tenido ocasiones de sobra para aprender cómo funciona esto, si algo sale mal es culpa de Sega, y si sale bien es gracias a quien sea menos a Sega.

Pero los bugs y el ser demasiado vago para informarse de lo que compramos antes de comprarlo, no son los únicos motivos de queja. Prácticamente desde que se anunció este port empezaron a aparecer críticas por estar haciendo eso mismo, un port, en lugar de un remake completo como se está haciendo por ejemplo con Resident Evil 2.

Estas quejas me resultan especialmente llamativas por el hecho de que han surgido ahora, cuando durante años y años lo que se ha pedido es que Shenmue fuese reeditado de la misma forma que otros juegos de Dreamcast fueron reeditados la pasada generación. ¿Acaso hubo remakes de Crazy Taxi, Space Channel 5, o los Sonic Adventure? Entonces nadie se quejó, pero ahora parece que los gráficos de Dreamcast no son suficiente para algunos.

¿Qué pasará con Shenmue 3? Dentro de un año lo sabremos.

Tampoco sorprende viendo que a Shenmue 3 no han dejado de caerle palos por sus gráficos desde que se mostró por primera vez, a pesar de que se advirtió una y otra vez que era una versión muy temprana y de las circunstancias en las que está siendo desarrollado, circunstancias que algunos parecen muy dispuestos a ignorar.

Ya solo el primer Shenmue es como 10 veces más complejo que Resident Evil 2 (cosa que no digo a la ligera pues sabéis que conozco perfectamente ambos juegos), y sin embargo todos sabemos lo que le ha costado a Capcom decidirse a remakearlo. ¿En serio alguien es tan sumamente ingenuo como para creer que Sega iba a hacer remakes completos de ambos Shenmue? Y esto teniendo en cuenta que Shenmue 2 es todavía más complejo que el 1…

Si ni siquiera Capcom estaba segura de invertir tanto en uno de sus juegos más famosos, queridos, y vendidos. ¿De dónde se creen algunos que va a sacar Sega las ganas de hacerlo con los Shenmue? El juego que casi hace quebrar la compañía, aunque a lo mejor es eso lo que quieren algunos, que termine de quebrar del todo…

Shenmue viene pidiendo una segunda oportunidad en estos tiempos de incomprensión, hipocresía, y cinismo. En los que todo es “una puta mierda” excepto lo que dicta la moda del mes. Un marco hostil en el que lo más probable es que la franquicia acabe otra vez bajo tierra, confirmándole así a Sega que tiene razón al creer que Shenmue no es rentable y nunca lo será. Por descontado que todos correrán a culpar a la propia Sega, confirmándoles todavía más que no es buena idea invertir en esta franquicia, ni hacer lo que la gente tanto le pide.

¿Queda alguna esperanza entonces? Si, la de que a pesar de todo se consigan unas ventas excepcionales, cosa que podría ocurrir viendo la escasez de copias disponibles a la que las propia d3t ha hecho alusión (han prometido sacar más). Esta sería la forma de decirle a Sega que se equivoca pensando que Shenmue no puede ser rentable, haciendo que en un futuro veamos más cosas de esta franquicia como por ejemplo esos remakes del 1 y el 2 que ahora se piden.

Yu Suzuki está observando atentamente todo lo que ocurre con este port de Shenmue 1 & 2.

Irónicamente parece que el tema del idioma ha quedado un tanto relegado ante todas estas otras quejas, probablemente porque los usuarios de PC bien saben que es solo cuestión de tiempo que alguien los traduzca. Incluso aún existe la posibilidad de que lleguen más idiomas a las versiones de consola si las ventas son buenas.

¿Venderán bien estos ports? ¿Qué tal le irá a Shenmue 3? ¿Se hartará Yu Suzuki y lo mandará todo a paseo? Eso solo el tiempo lo dirá. Lo que está ocurriendo ahora afectará por completo al destino de esta saga, así que escoged bien vuestro camino a seguir, porque yo personalmente no quiero tener que aguantar otras dos décadas de “Save Shenmue”.

Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.

El Museo: Classic Super Sonic, First 4 Figures

Everybody Super Sonic Collecting

Hacía mucho que no tratábamos a una de las estatuas de la principal compañía para este tipo de mercado con Sonic, y eso significa que tenemos mucho trabajo para terminar por cubrir la colección completa. Pero mucho mucho. Estos días he podido estar con uno de mis queridos bebés, así que he pensado en atacar este tema de raiz. Veamos como First 4 Figures llevaba a Sonic en sus años mozos con su segunda estatua, ¡Classic Super Sonic!

Estas estatuas no son algo que pueda coleccionarse así sin más. Con tres colecciones distintas, una cuarta en camino, nuevas entregas en las ya existentes, las clásicas mini figuras y los pequeños PVC de hace años, y la apertura a importaciones de otras empresas como las Boom8 de GNFToyz, hacerse con todo el catálogo de F4F es una tarea titánica que requiere muchísimo espacio, muchísimo dinero, y sobretodo, muchísima paciencia, puesto que comprar más de una o dos a la vez en caso de los más pudientes sería un suicidio económico. Por eso mismo yo he intentado hacerme con ellas en la medida de lo posible en orden cronológico. Esto quiere decir, que no compraré la estatua más reciente (salvo que realmente sea la mejor opción en ese momento) mientras que la más antigua sube a precios desorbitados.

Los veteranos del Museo recordarán que ya vimos hace mucho mucho tiempo la primera, Classic Sonic, y la tercera, Classic Metal Sonic, junto a la del 20 aniversario con Modern Sonic. Classic Super Sonic fue la segunda estatua lanzada en la línea clásica y en general de Sonic en First 4 Figures. ¡Vamos a ver la evolución que dieron del primer al segundo intento de representar al erizo!
Como ya sabréis, las estatuas de F4F están hechas de resina (polystone, más concretamente), lo que les da una suavidad y una dureza que no se consigue con otros materiales. Eso también implica una mayor fragilidad, por supuesto. El primer punto negativo de esta en concreto es que se notaba que era de las primeras que hicieron (F4F ha ido mejorando constantemente la calidad durante años, ya veremos las más recientes algún día!) y cuando Super Sonic se lanzó en 2011 llegó a algunas casas... imcompleto.

A diferencia de Classic Sonic, que era una única pieza solida, Super Sonic viene en dos, el cuerpo y la base. El problema es que por la pose, los brazos quedaban muy expuestos al traqueteo y eran demasiado finos por el diseño de personaje. No era raro que alguna que otra llegase manca a casa. En mi caso la mia no ha perdido nada, pero tiene una pequeña herida de guerra en el brazo, nada muy doloroso ni peligroso si se le da cariño y cuidados, pero otros no tuvieron tanta suerte.

La pose, problemas de brazos aparte, es Super Sonic en plena transformación. Los pies elevados (y apoyados en la base por los efectos de energía) y la cara de cabreo característica del erizo Saiyan. Los pies tienen unas barras de hierro para hincar en la base, de forma que pueda mantener esa pose sin muchos problemas. Es aquí donde llega el segundo problema, también minúsculo eso si. Por algún motivo uno de mis pies no encaja plenamente en la base, y eso hace que se quede ligeramente inclinada la estatua. No se va a notar a menos que te fijes mucho (yo de hecho la he tenido años y hasta hoy haciendo las fotos no noté la inclinación) así que no molesta, pero el fallo está ahí. También puede descolorer el zapato en el blanco de la energía si la metes y la sacas mucho, pero tampoco se va a ver esa parte así que da igual. No hagáis el chiste porfa.
Hablando de la base, aunque la descripción oficial menciona que está basada en Chemical Plant, yo veo un toque bastante más parecido a Death Egg. En cualquier caso es una base que le pega al personaje, y es bonita. Es aquí donde mencionaré que al igual que Metal Sonic, Super viene en dos ediciones. La normal, limitada a 1500 unidades, es la que yo tengo porque en aquél tiempo era mortal y no pudiente, así que me limité a eso. La edición exclusiva, de unas 350 unidades, tenía luces LED iluminando los pinchos de energía de la base funcionando con pilas.
Para muchos, como yo, la diferencia en este caso no era muy grande así que no pasa nada, pero el dato está ahí. Si me duele más el caso de Metal Sonic, que tuve que quedarme con la normal mientras que la exclusiva tenía el rojo de sus ojos iluminados y waklfgiawfbjdsvcsauc. Vale. Ya. Back to Super.

De tamaño, estamos hablando de una estatua grandota de unos 38 centímetros, mm arriba mm abajo. Son unos 8 más que Classic Sonic, pero esto es por la pose, puesto que las estatuas están a escala unas con otras. Una estatua de este tamaño y de este material pesa lo suyo, así que como siempre aconsejo, no las dejéis en estanterías o muebles frágiles, sobretodo no si tenéis varias. Lo mejor para mostrar estas joyitas son vitrinas dedicadas. Que si, que se que no todo el mundo puede tenerlas, yo mismo me tengo que apañar con estanterias normales por ahora, pero es la mejor opción sin duda.

Los que ya conozcáis a F4F sabréis que sus estatuas de resina vienen con una tarjeta de identificación, una de las señas de identidad de la marca. Estas tarjetas no solo son bonitas y hacen de complemento más que interesante para los coleccionistas, sino que son absolutamente únicas cada una de ellas. El código que viene en ellas hace referencia al número de tu estatua, (732 de 1500 en mi caso) y al introducirlo en la web te permitía asegurarte el mismo número de la siguiente estatua de la colección si la comprabas. Al ser estatuas tan antiguas este sistema ya no tiene uso, claro.

De nuevo volviendo al tema de la antigüedad, hablemos de la pintura y modelado, que es lo principal en un objeto así al fin y al cabo. Como digo, esta es la segunda estatua de Sonic que F4F hizo, y no solo con Sonic sino en general como empresa, la calidad de sus productos ha mejorado exponencialmente con los años. ¿Quiere esto decir que Classic Super Sonic es una mala figura? Ni de lejos. De hecho, la mejora respecto a Classic Sonic es más que aparente. La pintura tiene algo menos de brillo, dando un efecto más profesional y menos de "plasticucho", las pupilas se parecen más al estilo del diseño original en lugar de ser una pasta expandida, las púas tienen un acabado más redondeado, los zapatos tienen los detalles como la hebilla mejor acabados...
En general, es una muy buena figura, y nunca se ha vuelto a la baja calidad de Classic Sonic (y permitidme decir, que con baja calidad no digo mala, seguía siendo un producto muy bueno especialmente por su bajo precio de 120€ cuando salió, pero es la peor en comparación a sus siguientes trabajos). F4F ha insistido en que les gustaría lanzar un Classic Sonic nuevo para pulir ese primer lanzamiento, y han cumplido lanzando varias estatuas más con él, pero ya hablaremos de ellas en el futuro.

Para acabar, vamos a hablar del embalaje. No he dejado esto para el final porque me haya olvidado por completo de él y haya tenido que hacer una excursión al trastero para recogerlo, lo juro.

F4F tiene otra seña de identidad interesante, y es que manda sus estatuas en una caja de cartón única con un dibujo de la estatua, información sobre ella y el número escrito a mano, mientras que la caja bonita y colorida viene dentro de la de cartón. Esto se hace para darle una protección extra a la caja normal, pero al final han acabado cogiendo valor hasta estas cajas de cartón, puesto que muchos terceros se deshacían de ellas, y por supuesto de segunda mano es casi imposible verlas. Yo mismo por desgracia solo conservo la de Super Sonic, así que quería enseñarla aquí para quién no las conozca, como curiosidad.
La caja de verdad es mucho más acorde con las que ya vimos de Sonic y Metal Sonic, con fotos profesionales de la estatua y una bonita descripción del personaje. Se que no todo el mundo puede y/o quiere guardar este tipo de cosas pero yo siempre aconsejaré hacerlo... No solo suelen ser bonitas y son parte del producto con su trabajo de diseño y demás, principalmente si algún día por desgracia tenéis que venderlas tendrán más valor si vienen completas, y lo más importante de todo, más seguras que en su embalaje original no van a estar en ningún lado. Con esto no quiero decir que no las saquéis o no las expongáis, pero si por ejemplo en una mudanza tenéis que transportar este tipo de cosas, las vais a echar mucho de menos si no las tenéis.
Con esto creo que puedo dar por finalizada la entrada de hoy, no sin antes claro hablar del precio y donde encontrarla. Precio: Muy caro. Dónde: Pfft, suerte. Y con esto me voy, ¡Hasta la próxima!

No, en serio. En su día salió a un precio muy asequible, 150€ para la normal y 180€ la exclusiva con LEDs. Pero no estamos en 2011, y esta estatua lleva descatalogada años. Yo pude hacerme con ella por 120€ hace años, pero hoy en día encontrar una a menos de 300€ es casi imposible, más aún si queréis las luces. Como siempre digo, quizá penséis que no merece la pena, pero si sois fanáticos de este personaje, o del que toque en otra ocasión, intentad haceros con ella cuando podáis. Por supuesto no os quedéis en la calle por una estatua, ni ninguna otra cosa, pero si no queréis gastaros 300€ igual en un par de años no la podréis tener por menos de 500€. Dicho esto, solo hemos visto tres estatuas de F4F, cuatro si contamos la del 20 aniversario... nos queda mucho trabajo, y lo mismo os gusta alguna de las siguientes más que esta, ¿quién sabe?

Es altamente posible que la próxima la veamos mucho más pronto de lo que creéis, no quiero que pase tanto tiempo entre una y otra, principalmente porque eso suele significar que yo no las tengo y luego voy a ver las estrellas para conseguirlas. Pero mientras llega y no llega el siguiente Museo, pasad unas buenas vacaciones de verano los que aún estéis con ellas. ¡Nos vemos!

Opinión: Sega no es solo Sonic (Fantasy Zone)


Dispara a todo bicho viviente dentro de este universo rebosante de color.

El verano nos deja secos de noticias importantes sobre el erizo, pero eso abre la puerta a que rescatemos otro de los clásicos de Sega. En este caso le toca el turno a Fantasy Zone, un shoot’em up (o matamarcianos como siempre se le llamo por aquí) que fue sin duda uno de los títulos más exitosos de Sega en la década de los 80. Tanto es así que su protagonista Opa-Opa está considerado una de las mascotas de la compañía previas a nuestro erizo azul favorito.

El comienzo de esta serie hay que buscarlo en 1986, cuando los juegos de este tipo comenzaban a estar por todas partes. Precisamente para tratar de ofrecer algo diferente entre la oleada de títulos similares, Sega apostó por darle al juego un tono colorido y desenfadado, tal y como ya había hecho poco antes Konami con su clásico TwinBee. Entre TwinBee y Fantasy Zone nació un subgénero de los shoot’em up llamado “cute’em ups”, el cual seguiría creciendo hasta la decadencia de la popularidad de este tipo de juegos a finales de los 90.

Fantasy Zone puede parecer amable y desenfadado, pero quién lo subestime lo lamentará profundamente. Y es que este tipo de juegos son famosos por su endiablada dificultad, a la que en el caso de Fantasy Zone se suma una trama sorprendentemente oscura que casi parece más propia de Star Wars. También es importante destacar que Fantasy Zone transcurre en el mismo universo que otra famosa franquicia de Sega como es Space Harrier, el cual nació en 1985 de la mente del gran Yu Suzuki.

En la mayoría de shooters de este tipo la pantalla se desplaza automáticamente, y simplemente nos limitamos a mover la nave para disparar y esquivar peligros. Sin embargo en Fantasy Zone el scroll estará bajo nuestro control, y somos nosotros quienes decidimos si volar hacía un lado u otro. El escenario se representa de forma cíclica, de modo que nuestro objetivo no es llegar hasta cierto punto, sino destruir unos objetivos concretos en cada fase.

El arcade original de 1986.


Estos objetivos son las bases de las que emergen los enemigos, pero también habrá que hacer frente a escuadrones que en la mayoría de los casos no tendrán reparo alguno en lanzarse contra nuestra nave en plan kamikaze. Por el camino también podemos visitar una especie de tienda ambulante, donde podemos gastar las monedas adquiridas para mejorar el equipamiento de la nave.

Pronto descubriremos que Fantasy Zone es mucho más complejo de lo que aparenta, ya que es importante seguir una buena estrategia a la hora de destruir los objetivos y adquirir las mejoras. Llevar uno u otro tipo de disparo puede suponer derrotar al jefe de final de fase en segundos, o perder todas nuestras vidas frente a él.

Todo esto hizo de Fantasy Zone un juego verdaderamente popular que fue porteado a infinidad de sistemas, siendo originario de la placa arcade System 16 de Sega. La más famosa de estas conversiones es sin duda la de Master System, pero hubo también adaptaciones para PC Engine, Sharp X68000, MSX, e incluso NES entre otras. De hecho la consola de Nintendo recibió el juego por partida doble, ya que al llevar el juego desde Japón hasta América se efectuaron algunos cambios que prácticamente lo convirtieron en un port distinto.

De entre todas estas conversiones las más destacables son la de PS2, que solo salió en Japón y que incluye la saga entera al completo bajo el nombre de Fantasy Zone Complete Collection (dentro de la serie Sega Ages 2500). La de Saturn, que también fue publicada únicamente en territorio nipón y que es una conversión perfecta del arcade. Y la que recientemente llegó a 3DS dentro de la serie Sega 3D Classics, incluyendo nuevos modos de juegos y extras además de un espectacular efecto 3D.

Space Fantasy Zone, el crossover con Space Harrier que no llegó a publicarse.


Este Fantasy Zone original no tuvo demasiadas secuelas, pero si protagonizó montones de cameos en otros juegos, en algunos asumiendo directamente el papel protagonista como es el caso de Galactic Protector para Master System, o Kinetic Connection para Game Gear, ambos publicados exclusivamente en Japón. Pero sin duda que el cameo que más familiar os resultará a los fans de Sonic actuales es el que tuvo en Sonic & Sega All-Stars Racing.

Para encontrar la primera secuela de la serie tenemos que irnos a Master System, donde nació Fantasy Zone 2: The Tears of Opa-Opa. Esta secuela directa seguía el mismo estilo que su predecesor, y desde la consola de Sega fue porteada a otros sistemas como la placa arcade System E, MSX, y una vez más NES, o mejor dicho Famicom, ya que una vez más se quedó en el País del Sol Naciente.

Pero sin duda la conversión más destacable es la que hicieron los chicos de M2 para la placa System 16 (la misma del Fantasy Zone original), que fue incluida en el recopilatorio anteriormente mencionado para PS2. Dicha conversión es la que se empleó años más tarde como base para lanzar el juego dentro de la serie Sega 3D Classics para 3DS, convirtiéndola así en la mejor de todas las versiones de esta secuela.

La siguiente entrega la tenemos que buscar también en Master System, bajo el nombre de Fantasy Zone: The Maze (Opa-Opa en Japón). Esta entrega rompía completamente con el estilo tradicional de la serie alejándola del clásico shoot’em up y convirtiéndola en una especie de Pac-Man con modo cooperativo para dos jugadores. Este cambio puede chocar bastante al principio, pero lo cierto es que resulta en título bastante entretenido que mantiene toda esa capacidad de enganchar de los viejos arcades de los 80.

El único recopilatorio de los 3D Classics que salió aquí incluye los dos primeros Fantasy Zone.


A pesar de lo que mucha gente cree, las entregas de Fantasy Zone aparecidas en Game Gear y Mega Drive no son meras conversiones o remakes del original, sino que son secuelas en toda regla. En Game Gear es comprensible el fallo debido a que en occidente se llamó al juego “Fantasy Zone” a secas, a pesar de que su nombre era Fantasy Zone Gear, problema que por cierto también afectó a la serie Shinobi en estas consolas.

Este Fantasy Zone para Game Gear aprovecha la mayor capacidad de la portátil para manejar paletas de colores con el fin de ofrecer un resultado más colorido si cabe, con unos tonos suaves que le dan un aspecto precioso. Por su parte Mega Drive recibía Super Fantasy Zone, título muy buscado debido a que no fue publicado en America. Esta brillante entrega corrió a cargo de Sunsoft, que fue la encargada también de llevar las dos primeras entregas de la serie a Famicom. Por cierto, si queréis saber de dónde viene la música de las fases de bonus del Sonic 3D de Mega Drive/Genesis, no dejéis de echarle un vistazo a este Super Fantasy Zone…

En 1990 estuvo a punto de publicarse un curioso crossover para PC Engine que mezclaba Fantasy Zone y Space Harrier bajo el nombre de Space Fantasy Zone, pero por desgracia fue cancelado y nunca llegó a las tiendas. Hace unos años se liberó un prototipo que, si bien no es enteramente funcional, si que nos sirve para hacernos una idea de cómo habría resultado tan curiosa mezcla.

Finalmente la entrega más reciente de la serie (sin contar reediciones en Consola Virtual, móviles, o Sega 3D Classics) es el remake que apareció para PS2 del Fantasy Zone original (también dentro de la serie Sega Ages 2500), el cual casi vuelve a quedarse en tierras niponas. Por suerte fue incluido en el recopilatorio Sega Classics Collection que recogía algunos de estos remakes y conversiones, recopilatorio que goza de bastante mala fama por algunos de los títulos incluidos como Golden Axe.

Opa-Opa en Sonic & Sega All-Stars Racing.


Sin embargo no es el caso de Fantasy Zone, ya que este remake introduce gráficos 3D tipo cell-shading, y novedades jugables como la posibilidad de conservar nuestras monedas de una partida a otra, o secciones con jugabilidad 3D al estilo Space Harrier, todo mientras mantiene la jugabilidad y el espíritu del original. Ya solo por esto merece la pena hacerse con el recopilatorio entero, el cual no es muy difícil de conseguir hoy en día.

Y así daba sus últimos coletazos la serie Fantasy Zone en la pasada década, ya que desde entonces solo ha habido reediciones y algún que otro cameo. ¿Tendremos alguna vez un Fantasy Zone nuevo? No parece probable a no ser que el género de los shoot’em up recupere la popularidad de antaño, pero al menos nos queda un buen puñado de joyas que podemos descubrir (o rejugar) basadas en este colorido universo.

De momento la reaparición más inminente de Opa-Opa la tendremos en el remaster de Shenmue, donde aparece en forma de figurita coleccionable. Tal vez no sea mucho, pero a buen seguro que los chicos de M2 ya traman conversiones para Switch dentro de la nueva serie Sega Ages.

Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.