Opinión: Sega no es solo Sonic (Alex Kidd)
21 mayo, 2018
13:16
Etiquetas: Master System , Mega Drive , Opinion , Sega , Sega 3D Classics , Switch
Etiquetas: Master System , Mega Drive , Opinion , Sega , Sega 3D Classics , Switch
Salta sin parar con
la antigua mascota de Sega.
Mientras esperamos la avalancha de noticias que
presumiblemente nos dejará el E3, este es un buen momento para recordar otro de
los viejos clásicos de Sega. En esta ocasión le toca nada menos que a Alex
Kidd, personaje del que todo fan de Sonic seguro que ha oído hablar, aunque
solo sea por aquello de ser el precursor de Sonic como mascota de Sega.
Las peripecias de este cabezudo personaje comienzan en 1986
con Alex Kidd in Miracle World para Master System, consola que se convertiría
en su hogar de forma casi exclusiva. Recientemente hemos sabido que este juego
originalmente iba a ser una adaptación de la primera serie de Dragon Ball, lo
que explica muchas cosas sobre su diseño, y probablemente le habría dado unas
cuantas ventas más en su día que le habrían venido muy bien.
Esta primera aventura es para muchos la mejor, su mezcla de
plataformas y aventura dejaba atrás a otros títulos similares de la época, y su
dificultad hizo que tan solo unos pocos elegidos fueran capaces de llegar a ver
los créditos finales. El manejo de diferentes vehículos también fue algo
revolucionario en un juego de este tipo, y es algo que los juegos de
plataformas siguen usando incluso hoy en día.
Alex Kidd in Miracle World fue el primer juego de muchos
jugadores en Europa, Australia, y Brasil. Pero en el resto del mundo no pudo
ayudar demasiado a las ventas de la consola y pasó bastante más desapercibido.
Por suerte en los últimos tiempos va consiguiendo algo más de fama
progresivamente, gracias en gran medida a reediciones digitales en sistemas
actuales.
¿Merece la pena jugar hoy en día a este primer Alex Kidd?
Pues si merece la pena jugar a alguno, es sin duda a este. Por lo que es sin
duda el mejor punto por el que iniciarse en la serie. Eso si, tened en cuenta
que se trata de un juego muy de la vieja escuela, y que nadie os va a llevar de
la manita en cada fase. Se trata de un plataformas bastante difícil que
requiere más paciencia de la que les solemos otorgar hoy en día a los juegos.
Puede que este primer Alex Kidd no fuese un exitazo de
ventas (la fama le llegaría años más tarde al ser incluido en la mayoría de
packs de Master System), pero si fue suficiente como para dar lugar a varias
secuelas. Lamentablemente pocas siguieron los pasos de Alex Kidd in Miracle
World, tanto en el aspecto jugable como en la calidad.
El primer sucesor de esta saga fue Alex Kidd and the Lost
Stars para máquinas recreativas, y lo hizo el mismo año en que nació el
personaje. Este título presentaba un arcade plataformero muy diferente del
primer juego de la serie, en el que Alex y su novia Stella debían superar fases
de scroll lateral a base de saltar y disparar en un divertido modo cooperativo.
Y al tratarse de un juego para arcades se redujo notablemente el componente
aventurero, con una jugabilidad más sencilla y una menor dificultad.
Dos años más tarde Master System recibiría una conversión
del juego, pero perdiendo bastantes cosas por el camino, como por ejemplo el
modo cooperativo. Esto le restaba gran parte de interés al título, por lo que
pasó sin pena ni gloria por el catálogo de una consola que por aquel entonces
ya tenía cosas más interesantes que ofrecer.
Curiosamente Alex Kidd and the Lost Stars fue el segundo
juego de la saga, pero no el segundo que llegó a Master System, ya que ese
mérito le corresponde a Alex Kidd BMX Trial, el cual es sin duda el juego más
desconocido de toda la saga debido que solamente salió en Japón. Aquí el bueno
de Alex dejaba de lado las plataformas para meterse de lleno en carreras de
bicicletas con extrañas habilidades que les permitían ir por tierra, mar y
aire.
Asi como quién no quiere la cosa, este título convirtió a
Alex Kidd en la primera mascota plataformera que protagonizó un spin off de
carreras, y lo hizo 5 años antes que cierto fontanero. Además lo hizo
introduciendo un sistema de control de lo más curioso, que fue el principal
motivo por el que jamás nos llegó a occidente. Y es que para jugar era necesario
emplear un trackball, un mando especial con una bola que simulaba el pedaleo de
la bici. Como dicho mando nunca salió de Japón, tampoco lo hizo el juego.
Aunque si tenéis curiosidad existen hacks no oficiales que adaptan el manejo al
de un mando convencional.
Fue también en 1987 cuando nació el siguiente título de Alex
Kidd, pero no lo hizo de la manera convencional, ya que en aquel año se
publicaba Anmitsu Hime para Master System en Japón, una aventura basada en un
popular anime del famoso Studio Pierrot. Sin embargo aquí Alex Kidd decidió
hacer exactamente lo mismo que hizo Mario en aquel año con Doki Doki Panic, es
decir “apropiarse” de un juego que no es suyo y llevárselo a occidente.
Así ya en 1989 llegaba Alex Kidd in High Tech World a las
Master System occidentales, tomando el juego original japonés y
reconvirtiéndolo en una aventura de Alex Kidd. Este tipo de “mutaciones” para
occidente eran más comunes de lo que parece, y por lo general solían resultar
en algo radicalmente distinto a lo que estábamos acostumbrados en la saga en
cuestión. En este caso el cambio drástico hizo aún más indefinido el estilo de
la serie Alex Kidd, y además fue el inicio de una serie de tramas locas que
iban a sacar al personaje de su estilo habitual para llevarlo a lo que
básicamente eran parodias.
A pesar de esto Sega aún le dio una última oportunidad al
personaje antes de hacer que la serie acabase reducida a una comedia, y lo hizo
con Alex Kidd and the Enchanted Castle. Esta vez para la nueva consola que Sega
acababa de estrenar, nada menos que Mega Drive/Genesis. Cabría esperar que el
salto generacional le diese un impulso importante al personaje, y de hecho se
decidió dejar de lado los experimentos locos y volver al estilo del primer Alex
Kidd.
Así Enchanted Castle se presentó como una secuela directa de
in Miracle World, incluso en el plano argumental. Y se recuperaron gran parte
de los elementos que estableció el primer juego de la saga como base de la
serie. Por desgracia las prisas para tenerlo listo en el lanzamiento de la
consola hicieron que no se pudiese aprovechar bien el potencial de esta,
resultando así en un juego que, si bien es probablemente el segundo mejor de
toda la saga, flaqueaba en varios aspectos incluso con respecto al original.
Para colmo este juego se vio rápidamente eclipsado por otros
títulos para la consola sin siquiera tener que esperar a que llegase Sonic, ya
que por ejemplo Castle of Illusion lo dejaba bastante atrás en todos los
aspectos. Por no mencionar la llegada de SNES con Super Mario World, donde
sencillamente no había competencia. Así el pobre Alex pagó las prisas de Sega y
perdió su última oportunidad como mascota, haciendo que la compañía comenzase
ya a buscar su sustituto.
No obstante aún veríamos un último juego de la serie para
Master System, con el que Sega buscó precisamente explotar el lado cómico del
personaje empleándolo para parodiar otros de sus grandes clásicos. Para el
debut de esta nueva serie, Sega escogió la saga Shinobi para que fuese visitada
por el personaje en Alex Kidd in Shinobi World allá por 1990. El plan original
era llevar a Alex Kidd por otros mundos, e incluso introducir pequeños guiños
ajenos a Sega, como un curioso cameo del mismísimo Mario a modo de jefe de
final de fase.
Por desgracia dicho cameo no pudo llegar a materializarse en
la versión final por temor a las represalias de Nintendo, y además en aquel
entonces Master System ya estaba fuera de combate en Estados Unidos y Japón,
por lo que tal vez habría sido mejor haber iniciado esta serie en Mega Drive.
Pero por desgracia no fue así y hubo que sumar otro título más que pasó sin
hacer ruido, aunque al menos sirvió para que Alex Kidd se despidiese de
nosotros en la misma consola que le vio nacer.
Desde entonces somos muchos los que pedimos el regreso del
personaje, que merece sin duda una segunda oportunidad. No como mascota de
Sega, evidentemente. Pero si como franquicia de plataformas, género que parece
volver a estar de moda. Por desgracia el bueno de Alex Kidd sigue encerrado en
el baúl de los recuerdos de Sega, del que solo lo sacan de vez en cuando para
protagonizar algún cameo.
Le hemos visto aparecer en Shenmue, Sega SuperStars Tennis,
y ambos All-Stars Racing. Además de su memorable y especial cameo en Segagaga,
un curioso “simulador de Sega” para Dreamcast que solamente salió en Japón. Al
menos nos quedan las reediciones de algunos de sus clásicos, especialmente de
Alex Kidd in the Enchanted Castle, el cual regresará muy pronto en el nuevo
Sega Mega Drive/Genesis Classics para PS4, One, y PC.
También tenemos en camino una nueva reedición del Alex
Kidd in Miracle World original para Switch, y además de la mano de los genios
de M2, responsables de los Sega 3D Classics de 3DS. Seguro que esta nueva
versión trae algún que otro extra interesante, así que a ver si tiene buena acogida
y vemos pronto más cosas de nuestro viejo y cabezudo amigo.
Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.