Opinión: Sega no es solo Sonic (Nights)


Un juego de ensueño que vuelve a casa por Navidad.

De todos los clásicos de Sega que llevo repasados en esta sección, probablemente ‘Nights’ sea el que más cercano nos resulte a todos los fans del erizo, de modo que no creo que esta vez descubra nada nuevo a nadie. Sin embargo la elección de Nights no se debe solamente a la idea de rescatar grandes juegos de la historia de Sega, sino que más bien es algo que atiende a la cercanía de las próximas navidades.

Acabamos de arrancar el mes de diciembre, y es en estas fechas cuando a algunos sentimos a Nights rodando por nuestros recuerdos con mayor intensidad. Y es que Christmas Nights fue probablemente la mejor campaña publicitaria que se la haya hecho jamás a un juego, tal vez no la más eficiente, pero si la que mejor acercó el producto al usuario.

Lo de promocionar un juego con una demo era bastante común cuando salió Nights, y de hecho lo sigue siendo. Pero lo que no es tan habitual es que esa demo sea prácticamente un juego distinto, con un montón de contenido exclusivo y ofreciendo tantas (o incluso más) horas de juego como el título que busca promocionar. Además esto ha dejado de algún modo a Nights con cierto regusto de “juego navideño”, aunque la aventura original poco o nada tenga que ver con estas fechas tan especiales.

Cada Navidad el reloj interno de nuestra Saturn nos fijaba una cita con Christmas Nights, algo que si bien se podía trucar, dejaba de tener ese encanto tan especial si lo hacíamos. Así Nights solía colarse (y lo sigue haciendo) en las navidades de más de un fan de Sega, convirtiendo de este modo a nuestro arlequín volador favorito en una especie de Santa Claus seguero.

El mejor regalo de Navidad que nos ha hecho Sega.

Nights es, y siempre será, una franquicia muy especial aquí en Sonic Paradise, especialmente por el enorme cariño que le profesa nuestro gran Jack Wallace. Pero si alguien se está preguntando por qué es tan especial para nosotros, tal vez no conozca lo bastante a este entrañable personaje de Sega, y eso es algo a lo que hay que ponerle remedio cuanto antes.

Nacido en 1996 de la mano del Sonic Team, con Yuji Naka y Takashi Iizuka al frente, Nights buscaba ofrecer algo especial y diferente, algo que ayudase a vender Saturn más allá de las correrías de cierto erizo azul. Para ello se combinó magistralmente jugabilidad 2D y 3D, con unos preciosos entornos poligonales capaces de despejar cualquier posible duda sobre las capacidades técnicas de la consola.

Nights se puede jugar como un plataformas normal en 3D cuando manejamos a Claris y Elliot, los protagonistas que cada noche se encuentran con Nights en sus sueños. Pero si no queremos plataformear en 3D de forma lenta y pesada, bastará con que dejemos que nuestro personaje se dualice con Nights, pasando a una jugabilidad 2D tan rápida y fluida como la del mismísimo Sonic.

La sensación de volar libremente por estos imaginativos escenarios es algo que todo el mundo debería experimentar al menos una vez. Loopings, rizos, y vuelos rasantes con un control que nos dejará sensaciones muy especiales. Y todo mientras disfrutamos de una jugabilidad con cierto toque arcade en la que la base es tratar de hacerlo cada vez mejor para conseguir mejores puntuaciones.

Dulces sueños con Nights.

En nuestra primera partida nos puede parecer que Nights es corto y fácil, pero si queremos acceder al verdadero desenlace del juego tendremos que mejorar nuestras puntuaciones en cada fase, a base de hacer toda clase de combos que nos permitan conseguir la mayor cantidad de puntos antes de que se nos agote el tiempo. También habrá que aprender a derrotar a los jefes con estilo y celeridad, por lo que el juego termina resultando mucho más complejo de lo que parece al principio.

Todo esto mientras nos sumergimos en un mundo de fantasía que nos puede hacer saltar del sueño más colorido y agradable, a la pesadilla más siniestra y terrorífica. Nights, como los propios sueños en sí, es capaz de ofrecernos una visión luminosa y agradable, o una oscura y sobrecogedora. Todo dentro de este mundo de ensueño donde prácticamente cualquier cosa puede pasar.

Nights no solo cautiva a muchos fans de Sonic por ser obra de las mismas personas, o por su espectacular jugabilidad, también lo hace porque prácticamente ambos juegos conviven dentro del mismo universo. Nights acostumbra a colarse en los juegos de Sonic con frecuencia, y el erizo también se dio alguna que otra vuelta por los de Nights. Además la estética empleada en ambas series es muy similar, algo especialmente apreciable en los Sonic Adventure.

El primer Nights se convirtió en el que probablemente sea el juego más querido y recordado de Saturn, algo que tiene bastante mérito teniendo en cuenta la gran cantidad de joyas que la consola llegó a atesorar en su relativamente corta vida activa. Después Christmas Nights ayudó a que mucha gente conociese al personaje, y a que nos sigamos acordando de él cuando llegan estas fechas.

Journey of Dreams, grande, pero tal vez no lo bastante.

Estuvo en planificación una secuela para Dreamcast, pero jamás llegaría a materializarse en la última consola de Sega. Durante años estuvo rondando la posibilidad de sacar esta deseada secuela, pero todavía habría que esperar a la llegada de la generación siguiente. En un primer momento se pensó en 360 y PS3 como receptoras del título junto con un impresionante apartado gráfico, pero finalmente el proyecto fue llevado a Wii bajo el nombre de Nights Journey of Dreams. El bajón visual fue bastante apreciable, y los controles por movimientos de esta consola al final no se aprovecharon tan bien como se podía haber hecho.

El resultado fue un juego que pasó sin pena ni gloría por el abarrotado catálogo de la popular consola de Nintendo, a pesar de que al menos en el aspecto jugable era bastante fiel a su predecesor. De hecho quizá demasiado, resultando así tal vez en algo desfasado para su tiempo. Muchos fans tampoco vieron con buenos ojos la caracterización de los personajes y el trasfondo de la historia, lo que terminó por devolver a Nights a un profundo sueño del que aún espera para despertar.

Por suerte en tiempos más recientes recibimos una estupenda remasterización HD, que empleaba como base el remake del juego para PlayStation 2 que solamente salió en Japón. Gracias a esto Nights se paseó por 360 (retrocompatible con One), PS3, y Steam, y hoy en día podemos disfrutarlo sin tener que tener una Saturn en casa, y de paso con una buena puesta al día.

Además esta remasterización HD sirvió para adaptar al juego a los tiempos modernos, por lo que en cualquier momento se podría relanzar con algún lavado de cara. Nights fue afortunado de poder contar con esto, no como otros grandes títulos de Saturn que se quedaron atrapados en la consola original, como el también genial Burning Rangers.

Un sueño al alcance de todos gracias al remaster HD.

¿Volverá Nights alguna vez? Sin duda alguna, y no limitándose tan solo a algún cameo en un Sonic u otros juegos de Sega. Tarde o temprano nuestro arlequín favorito volverá a surcar los cielos en nuestros sueños, y esperemos que entonces tenga más suerte y se puede quedar más tiempo con nosotros.

Mientras tanto podéis descargaros el remaster HD para Xbox One o Steam si no lo habéis hecho ya, desempolvar la PS3, o rezar a Sega para que lo reedite en otros sistemas. Y si tenéis una Saturn por casa, ya sabréis que se trata de un auténtico imprescindible y que además no es especialmente caro de conseguir, especialmente en su versión japonesa.

De un modo u otro, dejad que el Sonic Team os sumerja en el mundo de sueños de Nights y nada volverá a ser igual. Ni siquiera las navidades.

Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.