Opinión: “En mis tiempos los mandos eran de esparto”




¿Eran realmente más difíciles los juegos de antes que los de ahora?

Hoy toca reflexionar sobre algo que a buen seguro habréis escuchado más de una vez, o que incluso vosotros mismos habéis dicho en alguna ocasión “¡Los juegos de antes eran más difíciles!”. ¿Pero lo eran realmente? Veámoslo.

De vez en cuando, todo jugador que lleve ya unos años en esto suelta alguna frase de esas que se dicen en el momento casi sin pensar fruto de una ocasión concreta. En este caso se suele decir cuando hemos visto o jugado un juego de ahora que nos parecía demasiado fácil. Inmediatamente los que están a su alrededor asienten en señal de aprobación sin ponerlo siquiera en duda. Pero estas cosas que se suelen dar por sentado tan a la ligera no siempre son del todo correctas, y sin embargo acaban tan arraigadas entre las personas que decir lo contrario o siquiera tratar de poner algún matiz, viene a ser equivalente a decir en plena Edad Media que la Tierra gira alrededor del Sol. Pero haciendo un análisis más profundo del caso uno se da cuenta de que no es una verdad tan sólida como parece.

Si nos vamos a los juegos que se hacían en los primeros años entonces aquí poco hay que tratar, títulos como Pac-Man o Donkey Kong simplemente retaban al jugador a conseguir la puntuación más alta, e iban elevando el nivel de dificultad gradualmente hasta llegar a un tope donde el juego se volvía casi imposible. Pero era la época de los puntos, donde los juegos prácticamente no tenían trama ni desenlace, y ganabas si tenías una cifra mayor en el contador de puntos que la del resto de jugadores de la tabla de clasificaciones. Pero después de eso la cosa se complicó, los juegos solían ya tener un principio y un final, y alcanzar ese final con mayor o menor esfuerzo suponía que el juego fuese más fácil o más difícil.

La época de “los puntos”.

En este periodo, cuando se trataba de un juego arcade, la formula era bien sencilla, hacer un juego de dificultad creciente que enganchase al jugador en sus primeros compases para después hacer que vaciase todas sus monedas tratando de completar el juego en niveles más difíciles. Cuanto más subiese la dificultad, más monedas se dejaría el jugador para tratar de acabarlo. Los juegos se hacían así aposta, para recaudar la mayor cantidad de dinero posible. En los sistemas domésticos esto ya no era necesario, pero como muchos de los juegos venían del arcade, pues heredaban sus niveles de dificultad. Este nivel de dificultad elevado también se usaba para compensar la escasa duración propia de los juegos de antes.

Visto desde cierto punto, esta hábil maniobra iba destinada únicamente a dejar secos de monedas nuestros bolsillos, eso que tan mal visto está ahora cuando una compañía de juegos tiene la “inconcebible osadía” de querer nuestro dinero. Sin embargo la formula funcionaba sin quejas porque era justo lo que pretendía, adictiva. “¡Ay que cerquita he estado de matar a ese jefe de final de fase! Venga una monedita más antes de irme a casa… “En sistemas domésticos no había dinero que recaudar por jugar, una vez te habían vendido el juego a la compañía ya le daba igual lo que hicieses con él, pero como esta formula viciaba, se solían mantener estos niveles de dificultad en juegos arcade. Si, en juegos arcade, o de estilo arcade, pues es de ahí de donde venía esta formula. ¿Pero que pasaba con el resto? Pues simple y llanamente que ni todo es blanco ni todo es negro, había juegos fáciles y juegos difíciles, no de puede decir que TODOS los juegos de antes fuesen más difíciles, porque no es cierto.

Así habría sido Q-Bert para algunos si hubiese salido hoy. ¿Tendrán razón?

Sin embargo había otro factor que influía directamente en la dificultad, y ese era la duración. La duración media de los juegos de antes era mucho menor que la actual, si entendemos como “duración media” la de juegos triple A de arcade, consola, o PC. Recuerdo perfectamente que una de las cosas que más me sorprendió del genial Sonic 3 & Knuckles fue su inmensa duración, y que una vez en su época me pase el juego entero cronometrando cuanto tardaba en completarlo jugando a ritmo normal y recogiendo todo lo que podía. Tarde unas 4 horas en total, si un juego de hoy en día dura 4 horas es quemado públicamente en la hoguera… Y sin embargo los juegos de antes nos duraban bastante tiempo, ¿por qué? Por la dificultad. Si tienes que reintentar 100 veces un nivel que dura 1 minuto, tardarás más de hora y media en pasártelo. También se une el hecho de que antes uno no solía tener tropecientos juegos, se compraba uno cada mucho tiempo y lo exprimía fondo.

Más de 6 meses estuve sacándole jugo sin parar al Daytona USA de Saturn en su día, un juego de carreras con 3 circuitos y un solo modelo de coche. Y hoy viene la gente llorando porque dicen que Gran Turismo 6 con sus aproximadamente 70 circuitos y más de 1200 coches les sabe a poco… ¿Son más cortos y fáciles los juegos de ahora, o es que nos hemos vuelto muy exigentitos? Claro está que vendrá alguno diciendo “bueno es que eran más divertidos”, pero eso, además de ser muy relativo, no viene a cuento con el tema de hoy sobre dificultad, aunque daría para otro articulo entero. Tampoco faltará el que diga que se pasó 500 horas jugando al Illusión of Time de Super Nintendo, pero es que ese tipo de juegos destacan por su enorme duración indiferentemente de la época de la que sean, y si no que se lo digan a todo aquel que se haya viciado al Skyrim.

¿Y con Sonic? No os preocupéis que no me olvido del erizo. Recuero que hubo un juego suyo que me sorprendió en su día por lo fácil que era, ese juego era el Sonic Chaos de Master System. En apenas un hora lo acabe y sin complicaciones. ¿Qué pasa si tengo que compararlo con juegos modernos como Sonic Unleashed o Sonic Lost World? Pues que queréis que os diga, esos Sonics recientes son bastante más difíciles se mire por donde se mire. ¿Son todos los Sonic de ahora más difíciles que los de antes? No, porque uno no se puede parar a comparar solamente ese caso. ¿O acaso es más fácil Sonic Spinball que Sonic Colours? Creo que va a ser que no…

Las maravillas de la libertad de elección.

Por otro lado existe la queja de que los juegos de ahora “te llevan de la mano”, que si tutoriales, que si “pulsa esto para hacer esto otro”, que si “dale a este botón para ganar”… Pero todas esas cosas se hacen en la inmensa mayoría de casos para hacer los juegos más accesibles y que puedan ser jugados por más gente. Me costó la vida en su época explicarle a mi hermana el control del primer Resident Evil, y sin embargo hoy en día cualquiera puede coger un Resident Evil moderno y aprender a jugar sin problemas. ¿Hace eso el juego peor? No, lo hace simplemente más accesible. En su época muchas veces la gente se atascaba en partes de los juegos no porque fuesen difíciles, si no simplemente porque no sabían que tenían que hacer. Ahí está nuestro querido Barril Rojo de Carnival Night en Sonic 3, la cosa más simple y sencilla del mundo, y sin embargo arruinó el juego a muchos que no fueron capaces de pasar de ahí en su momento.

 Y es que antes no teníamos las ayudas que tenemos ahora, cualquiera puede coger hoy en día el Alex Kidd in Miracle World de Master System y pasárselo sin despeinarse en un emulador usando savestates. Y si con eso no tiene suficiente ayuda, se va a Youtube y mira videos de gameplays. Entonces no teníamos ayudas externas de este tipo, pero eran eso “ayudas externas”, no eran parte del propio juego. Hoy en día nos atascamos en un nivel y corremos a Youtube o Google buscando la solución. Si te atascabas entonces en un juego lo único que podías hacer era preguntar a conocidos, o rezar porque en el próximo número de tu revista habitual diesen la solución. Todas estas cosas son condicionantes externos que no tienen que ver con los juegos en sí, ni modernos, ni antiguos.

También ocurre que muchos se vuelven comodones con los años, cogen un juego de ahora, se lo ponen en la máxima dificultad porque llevan muchos años jugando y son muy guays y se lo pasan todo en difícil, y en cuanto les matan 2 veces en un sitio dicen que el juego es una mierda y corren a llorar a Internet. A ver, si te pones el juego en máxima dificultad la primera vez que lo juegas, ¿Cómo no quieres que te cueste avanzar? Ah, pero es que si te lo pasas directamente en máxima dificultad te dan todos los logros/trofeos de todas las dificultades de golpe… Porque esa es otra, los logros/trofeos. A ver quien es el guapo que se saca el 100% de algunos juegos de hoy en día mientras dice que los juegos de antes eran más difíciles, porque algunos juegos de ahora se las traen para lograr el 100%… Creo que lo más difícil que he hecho como fan de Resident Evil a la hora de jugar, es pasarme el 5 en modo profesional, o el 6 en modo infierno. Comparados con eso los primeros juegos de la saga me resultaron un feliz paseo por el campo…

Los videojuegos en general se suelen basar en el método de “ensayo y error”, repetir una y otra vez algo hasta que sale. Cuantas más veces tengas que repetirlo, más difícil es. Pero esto es aplicable tanto a juegos de antes como de ahora, solo que antes les poníamos más empeño. La vieja dificultad “arcade” nos lo hizo mas digerible porque nos acostumbramos a ello, pero para alguien que no esté habituado a eso jugar a ciertos juegos, especialmente de 8 bits, puede ser el billete de ida hacia “Frustraciónlandia”. En algunos casos más por descuido en el diseño del juego, que por la propia dificultad en sí que pretendiesen los programadores. Aunque también es cierto que había mucho desarrollador sádico que parecía disfrutar viendo jugar a la gente a su complicado juego, pero eso no pasaba solo entonces…

¡Bienvenidos a “Frustraciónlandia”!

Y es que los propios desarrolladores de juegos actuales son también, en la inmensa mayoría de casos, jugadores de la vieja escuela, por mucho que pongan tutoriales y ayudas para hacer los juegos más accesibles, ellos también comprenden como era la dificultad de los juegos de antes y no quieren hacer “juegos para abuelas”. Recuerdo una conversación que tuve con Enric Álvarez, co-fundador de Mercury Steam, durante un Idéame hace algunos años en el que le pregunté acerca de las quejas que tenía la gente sobre la dificultad del Castlevania que ellos habían creado, del que decían que era demasiado difícil. Le planteé la posibilidad de usar sistemas de dificultad “autoajustable” como la que usaba el Mortal Kombat 9, juego en el que si juegas bien y ganas sin problemas, aumenta la dificultad, pero se pierdes mucho y no avanzas, baja sola. Me dijo literalmente que eso para él era “una mierda”, porque prefería poner un selector de dificultad de los de toda la vida y que el jugador se lo trabaje como se ha hecho siempre, y que si el jugador no era capaz de pasárselo ni en fácil, pues eso era problema del jugador.

¿Entonces que pasa? ¿Son más fáciles los de antes? ¿Son más difíciles? Pues simple y llanamente eran prácticamente iguales que los de ahora, había juegos más fáciles, y juegos más difíciles. Exactamente lo mismo que ahora, no se puede generalizar, depende de cada juego por separado. Cierto es que este mundillo ha cambiado mucho y ahora debe adaptarse a un público más amplio que antes, pero también es cierto que a algunos parece que les cuesta mucho desactivar el tutorial o las ayudas en las opciones y prefieren correr a quejarse en Internet porque el juego le esta llevando de la manita para que no se pierdan. Hay de todo, y siempre ha habido de todo, juegos más fáciles, juegos más difíciles… Y todo esto al margen del componente relativo propio de cada jugador, porque a algunos les costará mucho pasar una parte de un juego, y a otros no les costará nada. A mí por ejemplo no me supuso ninguna dificultad nuestro ya entrañable Barril Rojo de Carnival Night, pero habrá quien aun tenga pesadillas con él.

Los tiempos cambian, las quejas no.

En resumen, en esto, como en todo en esta vida, no se puede generalizar. Vosotros mismos como jugadores en el fondo lo sabéis, y si no sabéis cómo eran los juegos antes, pues simplemente coged un emulador, un juego de antes, y jugadlo sin ayudas modernas de ningún tipo, a ver cuanto os cuesta pasarlo. El romanticismo de los viejos tiempos muchas veces nubla el sentido, y aunque puede que buscando un término medio los juegos de antes tendiesen a ser algo más difíciles debido a ese factor “arcade” del que hablaba al principio, no se puede decir que todos los juegos de antes fuesen más complicados como si fuese una verdad universal. También nos hacemos mas viejos y cascarrabias con los años, y el “en mis tiempos todo era mejor” es una frase que ha resonado durante generaciones y generaciones. Hay que cambiar de mentalidad, o antes de que nos demos cuenta estaremos en el parque alimentado a las palomas y diciéndoles a los niños que no pisen el césped.


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