Opinión: Posers



Esas personas “veleta” que van donde sople el viento

En las últimas semanas nos encontrábamos con la noticia de que Nintendo por fin cedía a la presión y se abría al mercado de los móviles. Iwata no podía contener más tiempo las exigencias de los accionistas en vista de las malas ventas de Wii U. Era entonces cuando muchos de nosotros nos dimos cuenta de lo hipócrita que podían llegar a ser algunas personas, pues muchos de los que semanas atrás se rieron de Sega por focalizarse en los móviles, ahora se hacían los locos ante el movimiento de Nintendo, e incluso lo apoyaban.

Esto es simplemente hipocresía, no tiene más misterio. Pero junto con toda esta gente iban muchos otros que simplemente repetían lo mismo, personas que sin ser si quiera fanboys de Nintendo actuaban igual. Hablo de esa extraña e indómita especie que es el “poser”. No son ni mucho menos patrimonio exclusivo del mundo del videojuego, están por todas partes, y actúan como la masa social que son siguiendo la inercia de esta sin molestarse en ofrecer el menor atisbo de inteligencia individual, igual que si fuesen zombies.

Siempre que pasa algo aparecen haters, fanboys, trolls, y demás subespecies de Internet a molestar. Sin embargo estos individuos son, por suerte, una parte pequeña del total de usuarios de Internet. Ellos lo saben, y para dar más notoriedad a sus actos buscan el apoyo de los obedientes borregos de la red que van hacía donde haya ruido aun sin saber de qué va la cosa. Pero los posers no solo actúan ampliando la onda expansiva de las subespecies infectas de Internet, también hacen de las suyas en otros campos. Y son tantos que son capaces de variar completamente el resultado de algo importante.

No me meteré en campos que no me competen y me limitaré a tratarlo desde el punto de vista del videojuego, pero esto de los posers afecta a muchos otros campos y en ocasiones de manera muy preocupante. Hablando solo de videojuegos, el fenómeno poser es muy capaz de tirar abajo las ventas de juego o consola, o de hacer todo lo contrario aumentándolas sobremanera. Es algo que vemos a diario.

¿Pero en qué consiste? Pues básicamente en dejarse llevar por la masa social. De hecho es posible que nosotros mismos sin darnos cuenta lo hayamos hecho más de una vez. Luego está la gente que actúa así sistemáticamente prácticamente a diario. “¿Para qué pensar si otros lo pueden hacer por mí?” Son personas que simplemente reciben la información y la aceptan tal cuál, sin pararse a pensar, sin contrastarla con sus propios conocimientos, sin buscar otras fuentes de información. “No, esto es así porque todo el mundo lo dice”, o “Esto es así porque me lo ha dicho este que sabe mucho del tema”.

Papagayos, papagayos everywhere…

Mentalidad de papagayo, repetir sin pensar lo que otro ha dicho, sin saber siquiera lo que significa. Algo muy triste y a la vez muy dañino, y hasta peligroso en según que campos. Lo más curioso es que algunas veces esta mentalidad de rebaño se adopta voluntariamente, aun sabiendo que la realidad es otra. ¿Por qué? Pues porque lo que dice esa masa social conviene a nuestros intereses, lo que no es menos triste y lamentable.

Por la parte que nos toca con Sonic, lo hemos visto muchas veces. Véase todo lo ocurrido con Sonic Boom, con manadas de gente criticándolo aunque pasen completamente de Sonic. Otros repitiendo y dando por hecho cosas como lo de los “bugs fantasma” de la versión de Wii U sin haber jugado siquiera al juego. Y otros que aun sabiendo la verdad, manipularon a las masas simplemente porque odiaban Sonic Boom y se creían en una especie de ridícula “guerra santa” por salvar al Sonic de su infancia.

Estas manadas del absurdo han llegado a causar verdaderos daños, e incluso no han dudado en atacar a ex empleados de Sega que poca o ninguna culpa tenían. Unos iban “teledirigidos” por otros que previamente los habían manipulado a sabiendas, y otros dejándose arrastrar por la masa social sin pararse a ver qué estaba pasando realmente. Para colmo los medios generalistas son conscientes de todo esto, y lo suelen aprovechar para ganar visitas con la polémica.

¿Alguna vez os habéis preguntado por qué “X” juego o consola no tuvo éxito en su momento a pesar de ser bastante bueno? Ya os lo respondo yo; poserismo. Puede que el término “poser” sea cosa de ahora, pero es algo que ha estado ahí desde siempre. Lo que se conoce como seguir las modas, o las tendencias del momento. Da igual la calidad de un juego o consola si la gente no lo compra masivamente, y para esto hace falta la masa social, lo que incluye el poserismo.

Si la masa social pone sus ojos en un juego o consola, poco o nada va a importar la calidad de este, arrasará si o si. Muchos lo compraran sin saber si quiera cómo es o de qué va, solo porque su amigo/familiar/vecino lo tiene y parece gustarle. Y lo mismo ocurre a la inversa, si la “sociedad veleta” no pone su punto de mira en algo, importará muy poco su calidad y pasará sin pena ni gloria.

La teoría de la eBEEElución.

Véase por ejemplo la “moda retro” y aquí os pongo mi caso personal. Yo no me levanté un día y dije “voy a empezar a comprar juegos y consola retro”, a mediados de los años 90 me di cuenta que las consolas y juegos que poco tiempo antes era mi sueño tener, ahora de golpe no las quería nadie y se acumulaban en las tiendas de cosas usadas, e incluso en los contenedores de basura. Nadie quería esos “trastos obsoletos”, todos querían comprarse su PlayStation y deshacerse de todo lo anterior.

Así pasaron varios años, años de entrar en tiendas y viejos videoclubs comprándole estas cosas a vendedores que con una mueca parecían reírse de ti por estar librándoles de aquella “basura obsoleta” que ya nadie compraría, todo a precio de liquidación. ¿Quién ríe ahora? Antes era el bicho raro que compraba lo que nadie quería, ahora resulta que soy un “coleccionista retro”, lo que todos quieren ser…

Mi Knuckles Chaotix me costó 30€ en perfecto estado en el año 2001 (en una tienda que tenía fama de ser cara), ahora vale 10 veces eso. ¿Será que no ser un poser y no seguir las modas tiene sus ventajas? Os garantizo que así es, no solo por cosas materiales como lo económico como en este caso que os he puesto, de hecho eso es algo secundario. El principal valor está en lo personal, en la forma que tiene uno de construirse a sí mismo, en ser capaz de apañárselas uno solo si el día de mañana lo necesita, sin tener que necesitar que otro te diga lo que debes hacer.

Podría poneros muchos más casos (Shenmue por ejemplo), pero creo que ya captáis la idea. No os dejéis llevar por la masa social, una cosa es cambiar de opinión o incluso de gustos por iniciativa propia, y otra muy distinta hacer algo solo porque todos los demás lo hacen. Otro consejo que no me cansaré de dar, es el de tener cuidado con la información que nos llega y hacerle un minucioso análisis antes de aceptarla sin más. En otras palabras, pensar por uno mismo.

Esto ayuda a no acabar formando parte de la masa social borrega, ¿pero qué hacer contra ella? Pues por desgracia poco se puede hacer, lo único efectivo es tener cuidado de no formar parte de ella, pero una vez que el rebaño se pone en marcha, es prácticamente imparable. Podéis intentar sacar algún borrego del rebaño, pero el resto seguirá cuál imparable estampida.

Y así el lobo se aleja con su botín mientras dice: “No escuchéis a ese fanboy”.

Para terminar, os digo que eso de ser un “bicho raro” no es algo tan negativo como se nos quiere hacer creer. Hay que socializar, si, pero no tenemos porque hacerlo con todo el mundo, no todos piensan igual que nosotros. Por eso es recomendable escoger con cuidado las personas de nuestro entorno, buscar personas que nos acepten como somos, y no buscar ser de tal forma para que los otros nos acepten.

Está muy bien trabajar en equipo, así hemos llegado hasta donde hemos llegado. Pero hacerlo sin aportar nada es contraproducente. ¿De qué le serviría a un coche tener las cuatro ruedas en el mismo sitio? Cada uno en su lugar cumpliendo la función que sabe hacer. ¿Os acordáis de “El Equipo A”? Cada uno tenía su función, sus propias habilidades, imaginaos como habría sido si los cuatro miembros del equipo hubiesen sido Mr. T…

Buscad dónde encajáis en vez de buscar encajar donde no encajáis. Esto os vendrá muy bien para muchas cosas en la vida.


Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.