Opinión: Las cinco “R”
Reediciones, Remakes,
Remasterizaciones, Recopilatorios, y Refritos en general.
Si a algo nos hemos acostumbrado en los últimos tiempos, es
a lo que yo llamo “Las cinco “R””. Básicamente las cinco vienen a ser lo mismo,
volver a sacar a la venta algo que ya lo estaba de antes. Unas veces con alguna
mejora, otras tal cual, y otras sacando incluso un producto peor que el
original. ¿Pero son estos refritos cosa de ahora? ¿Son algo tan malo como
algunos dicen? Veamos.
Para empezar; no. Los refritos no son ni mucho menos cosa de
ahora. Reeditar juegos se lleva haciendo desde bien pronto en la historia de
esta industria, aquí tengo yo algún refrito de juegos de Atari 2600 para Master
System, por poner un ejemplo. También hay que saber diferenciar estas
reediciones de las conversiones. No es reedición que un mismo juego salga para
varios sistemas, si no que lo haga tiempo después de su lanzamiento original.
No tenemos que irnos muy lejos para encontrar las primeras
reediciones del Sonic 1 de Mega Drive/Genesis, pues ya fue incluido en varios
cartuchos multijuego para la propia consola. Quizá Sonic 1 sea el juego más
reeditado de la historia, ¿pero es eso algo malo? En absoluto. Reeditar un
contenido permite que más gente pueda conocerlo, que llegue a más público.
Mucha gente ha conocido Sonic 1 sin haber tocado jamás una Mega Drive/Genesis,
y esto se debe en gran medida a las reediciones.
Recopilación para Master System de viejos clásicos de Atari. |
Se tiende a pensar que como uno mismo ya ha jugado a un
juego, automáticamente todo el mundo ya lo ha hecho y a nadie más le puede
interesar. Pero esto no es solo un pensamiento absurdo, si no también bastante egoísta.
Si se aplicase como algunos demandan, nadie nacido después de 1991 podría haber
jugado a Sonic 1. No al menos sin tener que buscar el juego original o
emularlo. ¿Qué hay de malo en acercar el título a las nuevas generaciones?
Reeditarlo en sistemas posteriores facilita el proceso, y además supone
ingresos frescos para la compañía.
Ya sabemos que hoy en día es más caro que nunca hacer
juegos, y detrás de esto mismo está la proliferación actual de estos refritos.
Las reediciones permiten a las compañías ganar dinero, que luego invierten en
títulos nuevos. Es absurdo ese pensamiento de que por salir más refritos van a
dejar de sacar juegos nuevos. De hecho es más bien al contrario, las
reediciones facilitan la creación de nuevos juegos. Ya no solo porque le den
dinero a las compañías, si no también porque les sirven para ver por dónde van
los gustos de sus consumidores. Las ventas de una reedición pueden marcar y
mucho los pasos a seguir en la nueva entrega de una saga.
Sin embargo no son pocos los que cargan contra estas
reediciones, como si fuese obligatorio comprarlas… Si tú ya has jugado al
juego, y no te interesa lo nuevo que pueda traer la reedición. Nadie te obliga
a comprarlo, nadie va a entrar al asalto en tu casa y va a destruir todas las
copias previas que tengas de ese juego. ¿Entonces por qué tanta bilis contra
los refritos? ¿Es que acaso hay que jugar a absolutamente a todo lo que sale?
Si no va dirigido a nosotros, y no nos interesa, la solución es tan sencilla
como no comprarlo.
Recientemente hemos tenido el bochornoso caso del
recopilatorio físico de los Sega 3D Classics, y digo “bochornoso” por la
actitud de muchos usuarios, atacando e insultando a Sega por “pretender
vendernos otra vez los mismos juegos de siempre”. Durante años se le ha pedido
a Sega que reedite sus clásicos, cuando lo hacía se exigían precios bajos y
novedades, y en respuesta llegaron los Sega 3D Classics. Luego se exigió
edición física, que salió en Japón. Se exigió después que llegase a occidente…
¿Y ahora que sale, la gente explota en una nube de odio? ¿Estamos locos o qué?
Una carta de amor de Sega a sus fans que algunos respondieron con odio. |
Y el caso de los Sega 3D Classics es aún más sangrante si
tenemos en cuenta que debido a su bajo precio apenas suponen beneficio para
Sega. Son básicamente un “regalo” para los fans, a modo de fanservice
atendiendo lo que algunos nos hemos pasado años pidiendo a fin de lavar un poco
la castigada imagen de la compañía. ¿Y así se lo pagan algunos? Lamentable… Y
para colmo está la crítica estúpida de que eran los mismos juegos de siempre,
cuando hay títulos que nunca jamás habían sido reeditados como Thunder Blade, o
Galaxy Force 2.
Podría escribir un artículo entero ya solo con el
bochornosos caso de las críticas recientes al recopilatorio físico de los Sega
3D Classics, pero para el ejemplo que toca hoy, creo que ya veis por dónde voy.
No se puede estar pidiendo que vuelvan los clásicos y atacando cuando lo hacen,
y menos para que cuando sale algo nuevo se vuelva a atacar diciendo que no es
como el clásico. Quien solo quiera juegos nuevos, que se entere de una vez que
las reediciones propician el que salgan. Y quién solo quiera clásicos, que deje
de explotar en bilis cada vez que sacan una reedición solo porque no es la del
juego que él quiere. Ya llegará quizá el que quiere en un futuro si esta reedición
que no le interesa tiene éxito, flaco favor se hace a sí mismo atacándola.
Naturalmente no todas las reediciones son buenas, en algunos
casos se trata de aprovecharse de la nostalgia de algunos para vaciarles de
mala manera la cartera. Lo irónico es que en muchos de estos evidentes casos a
veces casi nadie protesta, e incluso se dan palmadas como focas. Véase el caso
de los recientes Pokémon para la Consola
Virtual de 3DS, cobrados al doble del precio habitual a pesar
de ser simples emulaciones que no aportan nada nuevo. Lo peor de todo esto es
que luego pagan justos por pecadores, y por eso no se deben evaluar todas las
reediciones de la misma manera.
Sonic empezó bien pronto con los recopilatorios y las reediciones. |
Y luego está el caso de los remakes, que básicamente son
hacer un producto nuevo a partir de uno antiguo. Lo mismo ocurre con los
reboots, con la diferencia de que un reboot destruye la saga existente reiniciándola,
mientras que un remake no molesta a nadie. Es por esto que siempre me declararé
en contra de los reboots a favor de los remakes, pues la parte buena viene a
ser la misma en ambos casos, pero no ocurre lo mismo con la parte mala.
Rehacer un viejo producto es mucho más caro que una simple
reedición, y en muchos casos es algo innecesario. Si tan perfecto era el juego
original, ¿para qué quieren que lo cambien? Así luego pasa lo que pasa, que en
cuanto en un remake nos cambian de sitio cuatro pixeles, la gente empieza a
clamar por sus infancias destruidas. ¿Para eso queremos remakes? Para querer
remakes hace falta ser un poquito abierto de mente, nada va a destruir ni
alterar el juego original (algo que si hace en parte un reboot). Si el nuevo no
te gusta, sigue con el original y punto. Y si te gusta, pues bienvenido sea ese
remake. Tendrás dos versiones de un mismo juegazo en vez de una.
Lo más curioso es que esta controversia por las reediciones
parece ser patrimonio exclusivo de los juegos, en otras industrias no existe
este problema (si acaso solo con los remakes). ¿Se queja alguien porque le
saquen su película clásica favorita en Blu-Ray? ¿Explota Internet en odio por
la reedición del disco de un popular músico? ¿Se acusa de ladrones y
estafadores a los dueños de una cadena de televisión por reemitir un viejo
programa? No. ¿Entonces por qué demonios si se hace con los juegos? Luego nos
sorprendemos de que desde fuera se vea este mundillo como un circo totalmente
carente de seriedad y nos preguntamos por qué ocurre…
No estaría mal una buena recopilación como extra para el 25 aniversario ¿verdad? |
Las opiniones vertidas en esta columna son de
exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan
necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.