Opinión: ¿Qué fue de los spin offs?



En la variedad está el gusto, pero ahora solo tenemos plataformas.

Faltan tan solo unos días para que (presumiblemente) nos llegue al fin nueva información sobre Sonic 2017, y Sonic Mania también va enseñando cada vez más cosas poniendo fin de una vez a esta desoladora sequía que hemos sufrido en los últimos años.

Pocas veces en la historia del erizo hemos visto salir tan pocos juegos, incluso parece que Sega ha perdido interés definitivamente en los móviles, al menos de momento. Para ahora tenemos con Mania y 2017, ¿pero y después? ¿Qué pasará luego, otros dos o tres años sin juegos?

Sonic Eraser, el primer spin off jugable de Sonic en 1991

Parece que Sega ha adoptado la estrategia de centrarse en los títulos principales dándoles bastante tiempo de desarrollo, y eso está bien. Pero empiezan a echarse de menos, y mucho, los spin offs jugables que sacaban a Sonic de sus habituales plataformas para llevarlo a nuevos terrenos.

Y es que si nos paramos a pensarlo, el último Sonic de no-plataformas que salió sin contar los Mario & Sonic, fue el All-Stars Racing Transformed, que salió nada menos que en 2012. Desde entonces llevamos esperando una tercera entrega de esta serie, o algo parecido en plan Sega Superstars Tennis, pero Sega no parece estar por la labor.

Hemos tenido juegos basados en Sonic Boom, si. Pero todos ellos de plataformas. ¿Por qué no sacar un Sonic Riders basado en Sonic Boom? Así habrían resucitado esta saga, a la vez que aprovechado el tirón de la serie. Y combinar Sonic Riders con Sonic Boom es bastante fácil, pues ambas sub-franquicias se prestan bastante a ello.

¿Sonic Boom Riders? Compro.

Estos juegos alternativos van bien para tres cosas: Primero para rellenar el hueco entre entregas principales y hacer más amena la espera. Segundo para que Sega vaya llenando sus arcas consiguiendo así un presupuesto mayor para los títulos principales del erizo. Y tercero, rompen la monotonía permitiéndonos jugar con Sonic de formas distintas a las habituales.

No se trata de saturar el mercado con juegos menores de plataformas como se ha hecho en otros tiempos, si no de sacar spin offs jugables que aporten cosas nuevas y diferentes a lo habitual en la serie. Es algo que se llevaba haciendo desde 1991, pero que en los últimos años ha desaparecido casi por completo.

Incluso en épocas oscuras y complicadas del erizo, estos spin offs jugables ayudaron a llevar mejor las cosas, como pasó por ejemplo con títulos como Sonic R o Sonic the Fighters en la época Saturn. Además a veces estos títulos permiten de paso rescatar viejas glorias de Sega a modo de Smash Bros, lo que de paso es un alivio para los sufridos fans de la compañía.

Un pequeño bálsamo en épocas más oscuras.

Yo mismo debo reconocer que ha habido épocas en las que me lo he pasado bastante mejor con estos spin offs jugables, que con las entregas principales que salían, y a buen seguro que no he sido el único ¿verdad? Estos “caramelitos” ayudan a sobrellevar mejor las cosas, especialmente cuando Sega no ha estado fina del todo con las entregas principales.

Por delante de Mania y 2017 hay un inmenso desierto que no sabemos si se va a llenar y con qué, es bastante posible que tengamos más juegos tipo Sonic Mania si este logra tener éxito, cosa bastante probable que ocurra. ¿Pero y lo demás? No solo de pegar saltos vive el fan de Sonic, y lo mismo es aplicable a muchas otras sagas similares.

Es previsible que con la llegada de la película lleguen más títulos del erizo, ¿pero van a ser todos de plataformas? Ojala que no, porque por mucho que nos guste el género, tanto de los mismo puede llegar a empachar. Esperemos que llegue de una vez el tan deseado All-Stars Racing 3, o algo similar que nos de un respiro.

En la variedad está el gusto.

Además ahora mismo estamos demasiado ensimismados con Mania y 2017, pero no está de más echar un vistazo a lo que nos espera después, pues otros tantos años de escasez no serían algo bueno. Esperemos que Sega se mueva y veamos más cosas, porque apostar todo a tan solo un par de cartas, es también algo muy peligroso.


Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.