Opinión: El hogar de Sonic.



Green Hill Zone, ese lugar tan especial.

A lo largo de todos estos años, nuestro erizo ha visitado montones de lugares de lo más variopinto, sin embargo hay un sitio al que a Sonic le encanta volver siempre que tiene oportunidad, y ese lugar es Green Hill.

Allí fue donde nació Sonic, el primer nivel de su primer juego, y sin duda la localización más emblemática de toda la saga. Esta entrañable ubicación está a punto de regresar por partida doble, tanto en Mania como en Forces. Y ya ha suscitado más de una polémica por la presunta sobreutilización de la Zona de las Colinas Verdes en los últimos tiempos.

¿Pero realmente esto es cosa de ahora? ¿Antes no se usaba tanto? Quizá en este punto a algunos les falle un poco la memoria, pero Green Hill es algo que siempre ha estado por ahí de un modo u otro. Ya sea directamente con su mismo nombre y aspecto, o con ligeras variaciones destinadas precisamente a evitar la reiteración.

Da igual que le cambien el nombre o la música.

Emerald Hill, Palmtree Panic, Green Grove… Da igual cómo se le llame o que pequeños cambios se le efectúen, Green Hill es un nivel cuyo esquema se suele repetir, y al que los fans del erizo ya deberíamos estar sobradamente acostumbrados.

Incluso en los Sonic de 8 bits volvió varias veces, como Green Hills (así en plural) en Sonic 2, o con un curioso aspecto mecanizado en Sonic Chaos bajo el nombre de Mecha Green Hill. En ambos casos con un tema musical de fondo distinto al habitual, concretamente el que serviría de inspiración para crear Toot Toot Sonic Warrior del Sonic CD japo-europeo.

Green Hill en Sonic Adventure 2.

También ha regresado en muchos otros juegos, como Sonic Drift, Sonic Blast, Sonic the Fighters, Sonic Adventure 2, Sonic Advance 3, Sonic Battle, o Sonic Generations. Y hemos seguido teniendo variantes suyas como Windy Hill en Sonic Lost World. Ya deberíamos estar acostumbrados a ello, sin embargo su presencia en Sonic Forces parece haber causado algo de rechazo.

Cierto es que puede hacerse un tanto reiterativo que se utilice otra vez a Sonic clásico y a Green Hill en un juego como Sonic Forces, pero tampoco sabemos aún que contexto tendrá dentro de la trama, y no tiene mucho sentido llevarse las manos a la cabeza porque Sonic vuelva al que siempre ha sido su hogar.

Green Hill en Sonic Forces.

Tal vez el único problema con Sonic Forces sea que la presencia tanto de Sonic clásico como de Green Hill, contradice al propio Sonic Team cuando insiste en que no es una secuela de Sonic Generations. Pero eso es ya cosa de ellos, y nosotros no podremos entender el contexto hasta que no juguemos al juego.

En cualquier caso para muchos (entre los que me incluyo) es siempre grato reencontrarse con Green Hill, ese lugar tan especial donde el colorido se apodera de todo, con esas rampas, loopings, y cuestas por las que Sonic puede dar rienda suelta a su velocidad. De hecho admito que yo mismo lo uso como fondo de pantalla del móvil, y su tema musical principal como tono de llamada.

Y es que está repleto de elementos como esa hierba verde brillante que a mi, por alguna razón, me recuerda no solo a las paletas de colores que se empleaban en Mega Drive, si no también en Master System. Cosa que en cierto modo tiene su explicación desde el punto de vista técnico. Lo mismo ocurre con ese suelo tan peculiar hecho de cuadraditos naranjas y marrones, una combinación tan reconocible, que bastaría con ver un solo píxel de cada uno de esos colores juntos para reconocer Green Hill (creedme, hice el experimento hace unos años).

Reconocible con tan solo tres pixels (comprobado).

A esto hay que sumarle el azul, tanto de las cristalinas aguas y cascadas, como del cielo. El azul es el color de Sega, y esos cielos azules con nubes blancas se han convertido en una de sus habituales señas de identidad. A esto se suma la flora local, como las características palmeras, o las plantas que giran y se retuercen llenando el escenario de vida.

Green Hill es un lugar que a todo fan de Sonic que se precie le gustaría poder visitar alguna vez, ya no solo por ser el hogar de Sonic, si no también por la propia belleza del sitio. ¿Qué fan de Sonic no se ha imaginado alguna vez tumbado en las praderas de Green Hill? Escuchando el gorgoteo del agua, y sintiendo la suave brisa. Mientras el sol lo ilumina todo y se respira aire limpio.

Un lugar muy visitado por invitados ilustres.

Green Hill es ese lugar al que muchos nos gustaría poder escapar de vez en cuando, aunque solo sea para recargar las pilas durante unas horas. Un sitio que en cierto modo se ha convertido en parte de la propia personalidad de Sonic, al que si tratamos de imaginarlo de la forma más icónica posible, seguro que lo hacemos con Green Hill de fondo.

¿Vuelve Green Hill? Pues bienvenido sea, tanto en Forces como en Mania. Le pueden cambiar el nombre, le pueden cambiar la música, pero siempre será ese lugar tan especial que no solo se ha convertido en icono de la franquicia Sonic, si no también de Sega y del mundo del videojuego en general.


Green Hill en Sonic Mania.
Las opiniones vertidas en esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.