Opinión: El síndrome del Barril Rojo.
Un curioso efecto que
tarde o temprano todo gamer ha padecido.
Ante todo no os asustéis, esto no es como esas cosas que los
medios sensacionalistas dicen que provocan los videojuegos, como el síndrome del túnel carpiano, la epilepsia,
o la imperiosa necesidad de entrar a un sitio lleno de gente y liarse a tiros
con todo el mundo con nuestras armas recién adquiridas en el supermercado de la
esquina (esto ultimo importado de USA). Este es un “síndrome” que no es maligno
pero si curioso, y que seguro vais a reconocer haberlo padecido en algún
momento en algún juego.
Pero antes de nada veamos el porque de que lo llame “del
Barril Rojo”, seguro que mas de un fan de nuestro erizo ya sabe por donde van
los tiros, pero para los que no explicare de que se trata. Cuando salió Sonic
3, el erizo estaba en su momento de mayor fama allá por 1994, la gente venia de
haber conseguido el reto de terminarse Sonic 1 y Sonic 2, y pedían más. En esto
que llego Sonic 3 y traumatizó a muchos jóvenes gamers con un elemento de
cierto nivel del juego que impidió a muchísima gente terminar el mismo en aquel
entonces. Ese nivel era Carnival Night, y ese elemento malvado era uno de los
barriles rojos con rombos blancos que pululaban por el nivel. La mayoría de
estos barriles solo se movían de acá para allá, unas veces haciendo de
plataforma, otras tratando de aplastar al pobre Sonic. Estos barriles eran
herederos directos de los cubos azules gigantes de Casino Night de Sonic 2, que
a su vez lo eran de los bloques verdes y naranjas de Spring Yard de Sonic 1. Un
elemento típico de estos niveles tipo pinball/casino vamos. De hecho en Sonic 4
podemos ver unos barriles azules que cumplen la misma función en el nivel de
Casino Street.
¿Pero que tienen de especial los de Sonic 3? Bien, pues es
que resulta que uno de estos maquiavélicos barriles bloqueaba nuestro paso de
forma muy concreta en un punto determinado del nivel impidiéndonos pasar. Aunque
también aparecía de esta forma en otras partes del nivel, había una en la que
era completamente inevitable pasar por allí. El caso es que la forma de pasar
de este punto es terriblemente sencilla y simple, de hecho no recuerdo haber
tenido jamás problema para pasar de ese punto en su momento, y nunca supe de
nadie que se hubiese atascado allí hasta que años mas tarde empecé a comprobar
como los casos se multiplicaban masivamente. Mucha gente no logró terminar
Sonic 3 en su día por esto mismo, especialmente muchas personas que entonces no
llegaban ni a los 10 años y que parecieron quedar traumatizados por este hecho
hasta tal punto de cogerle manía al juego entero. De hecho más de una vez me ha
venido gente diciendo que Sonic 3 estaba lleno de fallos que impedían terminar
el juego y que por eso no les gustaba y preferían mil veces Sonic 2. Hasta tal
punto llega la cosa que me he encontrado con personas que creían firmemente que
Sega lanzó Sonic & Knuckles a modo de parche para corregir los fallos que
tenia Sonic 3 e impedían jugar bien al juego entero.
Así se vivía en los tiempos en los que no había Internet.
|
Naturalmente nunca di crédito a lo que contaban estas
personas, simplemente no sabia a que se referían. Pero con los años me dio por
empezar a tirar del hilo para ver de donde venia todo esto, y todo me conducía
hasta un punto concreto del juego, el Barril Rojo de Carnival Night, el punto
donde termino la partida de Sonic 3 de mas de uno. De hecho si alguna vez os compráis
un Sonic 3 usado, y veis que la partida guardada del juego no va más allá de
Carnival Night, ya sabéis por que es…
¿Pero tan complicado era de pasar este punto del juego? No, para
nada. De hecho como comenté mas arriba jamás tuve ningún problema para pasar de
allí. La mecánica era bien simple, y es probable que mas de uno que esta
leyendo esto se lleve las manos a la cabeza cuando lea la manera de pasar de ahí,
porque la desesperación de algunos llegó hasta tal punto que pasaban esta parte
a base de empujar el barril saltando rítmicamente sobre él, o usando el rebote
del escudo de agua para hacerlo bajar a golpes. Tal es la cosa que una vez una
persona me aseguró con total rotundidad que Sonic 3 era imposible de pasar si
Tails te acompañaba porque había un bug que no te dejaba pasar de un sitio, ya sabéis
cual… Y es que esta persona era de las que pasaban de allí a base de saltar
sobre el barril, y claro, al hacerlo Tails saltaba junto a Sonic y le
descompensaba el barril impidiendo bajarlo a saltos… ¿Pero entonces que mágico conjuro hacia
funcionar este diabólico barril para que nos dejase pasar? Simple y llanamente
pulsar ARRIBA y ABAJO en el pad direccional de forma rítmica, al pulsar arriba
el barril ascendía, y al pulsar abajo descendía. De esta forma iba cogiendo
inercia y subía y bajaba cada vez mas hasta dejar libre el paso, tras lo cual
solo había que saltar de barril como si nada y seguir.
Saltar no era la mejor solución…
|
Cada vez que se lo explico a alguien que ha sufrido el
trauma de esta parte siempre reaccionan de una de estas dos formas. O bien se
llevan las manos a la cabeza y se puede hasta escuchar el sonido que produce la
vergüenza y la desesperación al salir a chorros por sus orejas. O bien dicen
algo en plan: “¡Dios que rebuscado, así como iba a dar con la forma de pasar de
ahí!”. Ante esta última siempre respondo con lo mismo, el mando de Mega Drive
(en su configuración original) solo tenía 3 botones y las 4 direcciones del pad.
Los 3 botones hacían lo mismo, saltar. Y del direccional, 2 de las 4
direcciones quedaban bloqueadas al subir al barril, que eran izquierda y
derecha. Esto quiere decir que las únicas opciones del jugador eran, o bien
pulsar el salto y ver que no servia de mucho, o bien pulsar arriba o abajo en
el pad, y al pulsar cualquiera de estas 2 direcciones el barril ya se ponía en
marcha y dábamos con la solución. Vamos que complicado no es, incluso la vieja técnica
de pulsar todos los botones del mando hasta que pasase algo resultaba efectiva
en este caso, y sin embargo ya veis… De hecho una de las escasas cosas que podíamos
probar a hacer mientras estábamos sobre el barril, era hacer spin dash para ver
si así el barril se rompía o algo, pero es que en cuanto pulsásemos abajo para
hacer el spin dash, el barril se moveréis y revelaría su secreto.
Lo peor es que ya había situaciones similares en niveles
anteriores, como las ruedas azules que nos abrían el camino, o los discos voladores,
ambos en el nivel de Marble Garden, nivel en el que nunca escuche que se
atascase nadie. Incluso en Sonics anteriores había gimmicks similares, como la
piedra que había que empujar en Marble Zone en Sonic 1, o las tuercas de
Metropolis en Sonic 2. ¿Por qué hay entonces tanto niño traumatizado con este
Barril Rojo de Carnival Night? Aun a día de hoy sigo sin encontrar respuesta, y
lo peor es que estoy convencido de que es responsable en gran medida de que
tanta gente prefiera Sonic 2 a
Sonic 3, ya que no conseguir terminar un juego frustra bastante.
Pero esto no es ni mucho menos algo exclusivo de Sonic, si
os paráis a pensarlo seguro que os vienen a la mente varios juegos que no
conseguisteis terminar porque os quedasteis atascados en un punto. Lo más
probable es que no guardéis buen recuerdo de esos juegos por no haberlos podido
acabar. Y es que claro, hoy en día con Internet cualquiera puede encontrar la
manera de pasar de un punto donde se quede atascado en segundos. Si además le
añadimos el que los juegos de ahora suelen “llevarnos de la manita” para que no
nos perdamos, pues el fenómeno claramente se reduce infinitamente. Pero en su día
era un autentica lacra que desató el odio de mas de un jugador hacia un juego
que no lo merecía.
Mas nos valía resolver el misterio del barril antes de que
se agotase el tiempo…
|
Lo mas irónico de todo esto, es que en muchísimo casos la
gente que me encuentro que se quedó atascada en dicho barril rojo de Sonic 3 (o
algún caso similar), es gente que suele quejarse de que los juegos de ahora son
demasiado fáciles y que van prácticamente auto-guiados, que ya no les plantean ningún
reto. Supongo que si junto al barril hubiese habido un cartel o un tutorial que
enseñase a la gente como pasar de ahí, se habrían quejado entonces porque era
demasiado fácil…
Cómo digo este fenómeno es universal en los videojuegos,
seguro que conocéis múltiples casos de esto, y además es para mí la causa de
que la mayoría de la gente suela preferir siempre los juegos de una saga que
son más fáciles o sencillos de completar, en lugar de otros más complejos. Para
ejemplo esta el caso de Sonic 2, que es el más fácil y sencillo de todos los
Sonic clásicos de 16 bits, y sin embargo es el más aplaudido por las masas. Lo
mismo ocurre con otra saga de la que sabéis que soy gran fan, como es el caso
de Resident Evil. La entrega clásica mas querida es la mas corta, la mas fácil,
y la que menos complejidad y dificultad entraña (Resident Evil 2).
Especialmente entre aquellas personas que jugaron por primera vez al juego
siendo niños. ¿Casualidad? ¿O el síndrome del Barril Rojo haciendo de las
suyas? Eso dejaré que lo decidáis vosotros mismos, aunque ya os advierto que esto
no es aplicable a todos los casos como es lógico, pero si podría serlo en
muchos de ellos, al menos en parte.
Y es que en el caso del Barril Rojo la cosa ha llegado hasta
tal punto que se llegó a preguntar medio en broma a Yuji Naka durante una
entrevista que le hicieron en el Summer of Sonic, por qué habían incluido este
elemento en el nivel que traumatizó a tantos niños. El pobre Naka se sorprendió
y reconoció no saber nada de este peculiar caso, para después admitir entre
risas que el mismo fue quien programó aquel barril, tras lo cual llegó a pedir
disculpas por ello. Por eso y por que esta estrechamente relacionado con
nuestro erizo, he querido usar este barril para nombrar a este curioso “síndrome”
digno de estudio sociológico entre los jugadores. Pues no recuerdo un caso
similar que haya llegado hasta estos niveles.
En cuanto al malvado Barril Rojo, jamás se le volvió a ver
en los juegos del erizo hasta que reapareció en el juego Shadow the Hedgehog a
modo de guiño. Lo que no sabemos es si fue con intención de trollear a los
fans, pues con Sega nunca se sabe…
Shadow no se libró de enfrentarse al terrible Barril Rojo.
|
Y hasta aquí hemos llegado, no porque nos impida seguir un
avieso barril rojo, si no porque hemos llegado al final de este articulo. Y si alguna
vez os encontráis con uno de estos “barriles rojos” en vuestro camino, solo debéis
recordar este dicho. “Sí del Barril Rojo queréis pasar, arriba y abajo debéis
pulsar”.
Las opiniones vertidas en
esta columna son de exclusiva responsabilidad de quien las emite y no
representan necesariamente el pensamiento de Sonic Paradise.