El Museo: Sonic 25th Anniversary Kit

El aniversario que nunca acaba.

Estamos a unas horas de distancia de Sonic Mania, el juego del 25 aniversario por excelencia para muchos. El retorno triunfal del Sonic de los noventa que tanto parecen echar de menos muchos fans, así que, ¿qué mejor manera de celebrar este 25 aniversario tardío (o extendido, más bien) que con una de las primeras cosas que se lanzaron para esta ocasión tan especial?

Aunque muchos cuenten Sonic Mania como el primer juego del aniversario, es de hecho el tercero. Antes llegaron Sonic Boom Fire & Ice y So
nic Dimensions (dentro de Lego Dimensions). Y Sonic Boom Fire & Ice contó con una edición muy limitada en tierras niponas, que aquí no llegamos ni a oler a menos que pagásemos por la importación de la susodicha. Hoy vamos a hablar de ella, para ver que sorpresas traía y para hacer sufrir a aquellos que no la conocieran en su momento, puesto que hacerse con una ahora mismo es… Díficil. Y caro. Muy caro. 


Lo más interesante de esto es que aunque sea una edición coleccionista de un juego de Sonic Boom, es más bien un pack de celebración del aniversario, puesto que incluye algo para todos los diseños.

Lo primero que nos encontramos al pedir este pack de hermosuras es obviamente la versión japonesa de Sonic Toon: Fire & Ice, con un envoltorio especial con una pegatina del 25 aniversario.

Dentro incluía un código que no venía en las ediciones normales del juego, y que te permitía entrar en un sorteo de varios premios, entre los que se incluían por ejemplo un dibujo laminado de Sticks realizado por Yuji Uekawa (diseñador de Sonic y sus personajes desde Sonic Adventure) o una de las 250 copias del CD Sonic 25th Anniversary Café. Por desgracia yo no tuve esa suerte, pero eh, no se puede tener todo. Se intenta al menos.

Tras sacar el juego, lo que nos quedan son varias cajas de cartón de diferentes durezas, que parecen guardar algo. Pero esas cajas tendremos que abrirlas más tarde, porque hay una bolsita de plástico…

¿A quién no le gustan los stands acrílicos? Pues esta edición no incluye uno, ¡incluye 7! Cada uno con una pose distinta de Sonic, en su diseño moderno. Son adorables, todos ellos.

Las bases son todas iguales, con el logo del 25 aniversario. Tenemos a Sonic corriendo, asustado, durmiendo, saltando, comiendo… Lo que queráis. Especial mención al que está mirando la hora, en referencia a los primeros juegos, ¡tiene un reloj de verdad!

Dejando de fangirlear por un momento y pasando a hablar de forma más técnica, la verdad es que tampoco se puede decir mucho más allá de que son unos buenos stands. Los dibujos tienen una calidad sobresaliente y por mi experiencia, no parecen estropearse fácilmente. Lo único es que algunos parece que les cuesta más entrar en las bases al principio, pero nada remarcable y con introducirlos un par de veces debería solucionarse.

Si ahora abrimos la caja más grande, nos encontramos que el siguiente regalo que nos ofrecen no es nada menos que una taza conmemorativa. Ésta incluye dos logos, uno a cada lado, y es llamativa sobretodo por ofrecer variedad. Ambos son logos del 25 aniversario, pero los dos son totalmente inéditos y diseñados para la taza. Uno de ellos está basado en la silueta de la cara de Sonic moderno, y el otro tiene el diseño chibi de Sonic que se ha estado usando recientemente en merchandising japonés, sobretodo en Joypolis (Aunque recientemente ha dado el salto a occidente junto a Sonic Boom, más sobre eso en futuros Museos).

Al igual que con los stands acrílicos, la calidad es la que se puede esperar de algo así. No es una taza de esas malas que se van borrando con el tiempo, al menos esa impresión me da, ya veremos en unos años. La cuestión es que de tenerla, tampoco creo que muchos de nosotros la vaya a someter a muchos usos más que el de exposición. Otras tazas puedes hacer la función de taza perfectamente.

Y con esto, tan sólo nos quedan dos cajas… ¿Qué habrá en la más pequeña?

… Oh. Un cachivache. Huh.

Bueno, ¡última caja! Y esta pesa como un muerto… De hecho, el cartón en esta era solo una funda, la verdadera caja esta vez se parece más a las que usamos cuando regalamos algo muy valioso…

¿Una almohadilla y todo?
Pues si, el premio gordo de esta edición especial no es ni más ni menos que un cubo de cristal, con Sonic Clásico al frente del logo del aniversario.
No es el primer cubo de Sonic que se hace, ya existían del décimo y vigésimo aniversario, pero nunca han sido tan asequibles al público como este. Cada uno de los anteriores no os va a costar menos de 500€ hoy en día (Razón por la cual no poseo ninguno, vamos). Si tenéis esta edición más os vale adorar esto cada día como una de las cosas más valiosas de vuestra colección, porque lo es casi con total seguridad.

Pero no se queda ahí, el cachivache de antes no estaba ahí para nada, no señor. En realidad se trata de una base para el cubo, que no solo lo mantiene en alto, si no que con las pilas necesarias lo puede iluminar. He grabado un pequeño vídeo para que veáis el resultado:


Ahora si, este es el final de esta preciosa edición especial. Como dije, aun siendo una edición de un juego de la rama Boom, incluye algo para todos los fans de Sonic. En su lanzamiento costaba unos 130€ aproximadamente, pero ya está totalmente descatalogada. Si queréis haceros con una, no es imposible, pero preparaos para despediros de COMO MÍNIMO 200€, si tenéis suerte. Yo sé que lo habría acabado haciendo si no hubiera podido conseguir una de salida, así que no os juzgaré. Adelante. El cubo lo vale él solito.

El 25 aniversario ya ha acabado oficialmente, pero como ya hemos dicho en esta web más veces, el 26 aniversario va a funcionar como una extensión del anterior. Aún tenemos que jugar a Sonic Mania y Sonic Forces, tenemos por delante el próximo resurgir de la saga de Sonic Runners con Sonic Runners Adventure, mucho merchandise que conseguir y analizar, y sin duda nos esperan más sorpresas en los próximos meses. Así que aunque sea un poco atrasado, ¡feliz 26 cumpleaños erizo!