Seguimos con la ronda de análisis de esta cobertura del SAGE 2011, y esta vez le toca el turno a Charmy Maze, un bonito juego de puzzles protagonizado por Charmy Bee.

Charmy Maze es un juego muy simple, pero a la vez adictivo. Es un juego de puzzles donde nuestra misión es conseguir atravesar un circuito lleno de trampas sin chocarnos contra ninguna pared ni contra ningún obstáculo. Algo que así dicho parece simple, pero que en la práctica puede llegar a resultar de lo más entretenido.


El juego nos da la bienvenida con una cutscene dibujada, que aunque es placeholder, ya da una buena impresión del cuidado que en los gráficos ha puesto Sonictopfan, el desarrollador del título.

Y es que si en algo destaca este fangame es en lo cuidado de sus gráficos (con bonitos, detallados y grandes sprites para los personajes, y preciosos fondos,) y en lo cuidado y pulido del juego en sí, con detalles como incluir clips de voz en los personajes, cutscenes, y remixes de los temas de Seaside Hill y Marble Zone (los dos niveles jugables en esta demo) de bastante calidad, que si bien no son el máximo alarde de originalidad, casan perfectamente con el nivel y con la estética del juego.

La trama es simple pero cumple con su papel: Charmy recibe un premio de un viaje y se va sin invitar al resto de los chaotix. Cuando vuelve, todos están muy enfadados con él. Charmy debe conseguir atravesar las mazmorras llenas de puzzles para así llegar hasta sus amigos y vencerlos en batalla, para hacerles entrar en razón y descubrir por qué están tan enojados.

El juego se divide en dos modos muy difrenciados: primero, las mazmorras donde tendremos que atravesarlas sin tocar las paredes ni, por supuesto, que nos dé ninguna de las trampas como la lava o techos que se desmoronan. Repartidas por la laberíntica mazmorra tenemos flores que sirven de checkpoints, de manera similar a como lo hacían en Sonic Heroes.

El otro modo de juego son las boss battles, en las que debemos conseguir saltar sobre nuestro adversario (Vector en el primer nivel) un determinado número de veces, con unas físicas similares a las de los sonic plataformeros de 16 bits.
En resumen, este juego no es el típico fangame. Es una original propuesta muy bien pulida y que merece la pena probar, puesto que el cariño que se nota que ha puesto en el proyecto su desarrollador, y el cuidado por el detalle del mismo, hacen que destaque entre tanto fangame de esta feria.

Desde Sonic Paradise os recomendamos que os paseis por su stand del SAGE, descargeis el juego, y dejeis un comentario en su página de Deviantart para felicitar a su creador.